El regreso de Marcelo Gallardo a River Plate ha generado un gran revuelo en el mundo del fútbol argentino.

En su primera visita a La Boca durante esta segunda etapa, el estratega demostró que está listo para volver a hacer historia.

Con un notable atuendo gris y una actitud serena, Gallardo llegó a la Bombonera, donde las caras de los aficionados de Boca reflejaban preocupación y desconcierto.

A pesar de que la mayoría de la alineación inicial era de suplentes, el equipo mostró un compromiso impresionante.

La victoria de River fue significativa, ya que ocurrió en medio de la contienda de la Copa Libertadores, un torneo que el Muñeco considera crucial.

Durante la conferencia de prensa posterior al partido, Gallardo afirmó: "Esta victoria vale y mucho.

El compromiso del equipo fue tremendo para buscar el partido y no dejar que Boca impusiera su juego".

Su regreso es comparado con el de Ángel Labruna, una de las leyendas de River, con quien comparte no solo el éxito en el club, sino la presión y las expectativas que conllevan jugar un Superclásico.

Gallardo sabe que cada vez que se enfrenta a Boca, el peso de la historia y la pasión de los hinchas están en juego.

Para este Superclásico, el entrenador decidió utilizar una alineación alternada con miras al duelo contra Colo-Colo en la Copa Libertadores, buscando gestionar las cargas de sus jugadores.

"Teníamos que renovar energías después de un partido duro.

No vinimos a La Bombonera a ver qué pasaba; estábamos convencidos de lo que teníamos que hacer", comentó el entrenador.

Durante el partido, Gallardo no se mostró indiferente ante las provocaciones.

Aunque recibió insultos desde las gradas, se mantuvo centrado y fue crítico con el árbitro Nicolás Ramírez por no expulsar a Marcos Rojo cuando merecía la roja.

A pesar de estos condicionantes, elogió la disposición y concentración de sus jugadores.

"El triunfo es de ellos", subrayó Gallardo, reafirmando su papel como líder del equipo.

Con esta victoria, Gallardo ha visitado la Bombonera como entrenador de River en trece ocasiones, logrando su tercera victoria.

Las anteriores victorias se dieron en 2017 y 2018. En estos encuentros, ha cosechado un total de tres triunfos, siete empates y tres derrotas, pero su influencia es indiscutible.

Este triunfo interrumpió una racha invicta de Boca como local de casi un año, siendo su última derrota en octubre de 2023 contra el propio River, bajo la dirección de Martín Demichelis.

Este triunfo, además, le permite igualar a Ángel Labruna con nueve victorias sobre Boca como director técnico, un hecho que sin duda fortalecerá su legado en el club.

La histórica rivalidad entre estos dos equipos no solo trasciende el campo, sino que también se vive intensamente en la cultura futbolística argentina.

Con cada Superclásico, los hinchas esperan la oportunidad de celebrar o lamentar, y esta vez, el escenario fue completamente favorable para los de Núñez.

Gallardo ha demostrado que su regreso no es solo una nueva etapa, sino la continuación de una leyenda en construcción, donde cada partido agrega un capítulo decisivo a la historia del club.

Resta ver cómo afrontará el siguiente desafío en la Copa Libertadores, un torneo que siempre ha estado en la mira de los hinchas y la directiva de River.