La Selección Argentina enfrenta un desafío tras la expulsión de Nico González, quien se perderá el próximo encuentro por las Eliminatorias.
En un cierre dramático del partido contra Uruguay, la Selección Argentina tuvo que lamentar la expulsión de Nico González, un hecho que deja al equipo con una significativa baja para su próximo encuentro en las Eliminatorias Sudamericanas, programado contra Brasil.
A tan solo unos minutos del pitido final, específicamente a los 95 minutos, el delantero argentino cometió una falta que le costó la tarjeta roja, tras impactar con una patada en la cara a Nahitan Nández.
La acción provocó un unánime grito de 'roja, roja, roja' desde la sala del VAR, evidenciando la gravedad de la acción.
El árbitro, tras consultar con sus asistentes, no dudó en mostrar la tarjeta roja a González, quien deberá cumplir suspensión en el crucial partido contra la selección brasileña.
Los encargados del VAR argumentaron su decisión indicando que 'hubo contacto pleno por debajo del cuello, con una intensidad alta. No se juega el balón', reforzando así la decisión inicial del árbitro. Este incidente marca un golpe duro para el equipo dirigido por Lionel Scaloni, quien tendrá que buscar alternativas para reemplazar a un jugador clave.
En cuanto al desarrollo del partido, Argentina logró llevarse los tres puntos con un esfuerzo emocionalmente cargado al enfrentar a un rival complicado como Uruguay.
El único gol del encuentro llegó de la mano de Thiago Almada, quien anotó a los 68 minutos, lo que le permitió a Argentina obtener una victoria vital por 1-0, consolidando su posición en la lucha por la clasificación al Mundial de 2026.
"Este triunfo ha sido muy importante, nuestros jugadores han demostrado garra y fuerza ante un rival difícil", comentó Scaloni tras el encuentro.
Este resultado ha sido un importante punto de inflexión para la selección argentina, sobre todo considerando la derrota sufrida el año pasado en el mismo escenario, La Bombonera, donde no pudieron superar a Uruguay.
Este triunfo, por tanto, ayuda a restaurar la confianza del equipo en sus capacidades.
A lo largo de la historia de las eliminatorias, los enfrentamientos entre Argentina y Brasil siempre han sido momentos destacados, con un legado significativo de rivalidad.
Con la tensión ya latente, la ausencia de González seguramente afectará la estrategia, y el cuerpo técnico tendrá que considerar todas las piezas disponibles para hacer frente a la poderosa selección brasileña.
Con un presente esperanzador, la afición argentina ahora mira hacia adelante, esperando que la Selección siga mostrando un buen nivel y consiga asegurarse una clasificación que parece al alcance de la mano, a pesar de los obstáculos que surgen en el camino.
