El exfutbolista de San Lorenzo, Néstor Ortigoza, enfrenta serias acusaciones de violencia de género y se defiende en la reunión de Comisión Directiva, señalando una supuesta conspiración del presidente del club.
San Lorenzo se ve envuelto en un nuevo escándalo con la presencia de Néstor Ortigoza, quien ha sido denunciado por violencia de género por parte de su ex esposa, Lucía Cassiau.
La situación ha tomado un giro inesperado con la aparición de videos comprometidos en redes sociales que muestran situaciones de agresión.
A pesar de esto, Ortigoza se presentó en la reunión de Comisión Directiva del club, donde reafirmó su decisión de no renunciar a su puesto como vocal.
Durante la reunión, Ortigoza estuvo acompañado de su abogado y se sentó alejado de Marcelo Moretti, el presidente del club, a quien acusó de orchestrar la filtración de los videos con el objetivo de deslegitimarlo.
Esta dinámica ha desatado tensiones no solo en lo personal, sino también en la estructura directiva del club, que enfrenta una crisis tanto deportiva como institucional.
Moretti respondió a las acusaciones sugiriendo que Ortigoza debería presentar pruebas de sus afirmaciones ante la justicia.
En respuesta a un pedido de la Subcomisión de Género y Diversidad, que solicitó su suspensión y posible expulsión, Ortigoza manifestó su voluntad de mantenerse en su cargo y desafió a la comisión a proceder según el estatuto, argumentando que no ha sido juzgado y que ya ha presentado evidencias para su defensa.
La controversia se intensifica cuando se considera el contexto familiar de Ortigoza, quien comparte dos hijos con Cassiau y se encuentra envuelto en un proceso judicial complicado.
Recientemente, un registro domiciliario en la vivienda de su ex pareja resultó en la incautación de armas de fuego, lo que ilustra la gravedad de la situación.
Al mismo tiempo, el Juzgado de Familia N° 6 de Lomas de Zamora ha dictado una orden de restricción hacia Ortigoza, buscando proteger a la madre de sus hijos tras la difusión de los videos.
Este conflicto se ha convertido en un dramático capítulo para San Lorenzo, un club que, además de lidiar con su desempeño deportivo en la parte baja de la tabla, enfrenta problemas internos en su dirigencia.
La aparición de estas fuertes acusaciones y la respuesta desafiante de Ortigoza han generado un ambiente tenso y polarizado.
Cabe recordar que Ortigoza fue una figura clave en el club, siendo parte del equipo que ganó la Copa Libertadores en 2014. Sin embargo, su situación actual y sus declaraciones sobre lo que considera una 'operación mediática' en su contra están afectando su reputación y la de la institución.
La historia continúa desarrollándose, con San Lorenzo emitiendo un comunicado exigiendo la renuncia de Ortigoza por su comportamiento, lo cual él rechaza argumentando que todo es parte de un ataque orquestado.
Mientras tanto, la Subcomisión de Género y Diversidad subraya la importancia de abordar estas denuncias de manera seria, enfatizando que el silencio no es una opción ante la normalización de la violencia.