La Justicia ha otorgado una medida cautelar que asegura la continuidad educativa de los hijos de Rodrigo Rey, el arquero de Independiente, tras la negativa del colegio que los había rechazado.
La situación de Rodrigo Rey, el destacado arquero del club Independiente, y su familia ha tomado un giro favorable, gracias a una reciente decisión judicial.
La medida cautelar concedida por la Justicia garantiza que sus hijos, Benicio y Renata, continúen con su educación en el Instituto José Manuel Estrada, ubicado en City Bell, La Plata, donde anteriormente se les había negado la matrícula escolar.
Esta medida de urgencia permitirá que los niños, que enfrentan desafíos asociados al Trastorno del Espectro Autista (TEA), retomen su escolaridad de forma provisional, lo cual es un alivio para la familia y un paso positivo hacia la inclusión educativa.
Carla Junqueira, abogada que representa a la familia Rey, destacó la importancia de esta resolución. "Es un primer paso fundamental en la protección de los derechos educativos y emocionales de los niños. Este resultado les permite continuar con su desarrollo en un entorno escolar conocido, lo cual es vital para su bienestar", afirmó Junqueira.
Los antecedentes de esta situación se remontan a octubre del año anterior, cuando el colegio notificó a la familia sobre su decisión mediante una carta documento.
Esto provocó la reacción no solo de Rey y su esposa, Lali, sino también de la comunidad en general, quienes alzaron su voz a través de las redes sociales.
Los padres denunciaron una falta de adaptación e inclusión en el centro educativo, sumado a la falta de un ambiente apropiado para Benicio, quien necesita cuidados específicos.
El descontento surgió cuando la familia mostró una colchoneta que fue utilizada como un improvisado "espacio de calma", considerando que era inadecuado para las necesidades de su hijo de 8 años.
En respuesta a estas circunstancias, Rey y su pareja habían propuesto contribuir económicamente a las reformas necesarias en el colegio.
Paulo Morales, presidente de la Asociación Civil TEActiva, que se dedica al apoyo de familias con niños neurodivergentes, también se refirió a la relevancia de esta resolución.
Según Morales, "este es un gran avance para la comunidad del autismo, ya que los casos similares se replican por todo el país, donde muchos padres enfrentan el rechazo constante al buscar escolaridad para sus hijos".
La medida cautelar representa una luz de esperanza en un contexto donde el sistema educativo puede ser cruel e injusto para quienes requieren de una mayor inclusión y accesibilidad.
El pasado lunes, en un partido jugado por Independiente contra Atlético Tucumán, la comunidad futbolística también mostró su apoyo al arquero. Ambos equipos saltaron al campo con auriculares que bloquean el ruido y una camiseta con el mensaje "Con los chicos no, este partido lo jugamos todos".
Los fans en las gradas llevaron una bandera que decía: "El autismo es parte de este mundo, no es un mundo aparte". Este acto de solidaridad dejó a Rey visiblemente emocionado, recibiendo el aplauso y cariño de la afición.
Esta decisión judicial marca un hito importante no solo para la familia Rey, sino para todos aquellos que luchan por un derecho fundamental: la educación inclusiva y la igualdad de oportunidades para todos los niños.
La comunidad espera que esta medida sirva de precedente para que otras familias puedan beneficiarse y que se tomen en consideración las necesidades de los niños con discapacidad.
