El plantel de River Plate comenzará una mini pretemporada destinada a mejorar su rendimiento físico y táctico tras el reciente empate en el clásico ante Independiente en Avellaneda.

Este descanso se produce luego de una intensa serie de partidos, donde el equipo disputó seis encuentros en un intervalo de menos de un mes y tuvo que afrontar la tensión de los octavos de final contra Talleres de Córdoba.

Marcelo Gallardo, entrenador del equipo, ha decidido implementar un retiro que dará inicio el día martes y se extenderá hasta el sábado en el Hilton de Pilar.

Este espacio servirá como lugar de concentración donde los jugadores llevarán a cabo entrenamientos a doble turno.

La meta de Gallardo es lograr que sus futbolistas adquieran una mayor intensidad en su juego, así como también reestructurar aspectos tácticos que han sido descuidados debido a la apretada agenda.

El enfoque del cuerpo técnico es claro: quieren devolver a River Plate el estilo de juego agresivo y dinámico que lo caracterizaba.

Gallardo espera que los ejercicios físicos y tácticos ayuden a que el equipo retome su conocida presión alta sobre el rival, lo que les permite recuperar la pelota rápidamente después de perderla.

Este enfoque está destinado a desactivar las estrategias de los oponentes, creando caos controlado en el que los jugadores ocupan espacios de manera fluida y natural.

Aparte de trabajar en la intensidad, Gallardo enfatizará la importancia de la circulación y posesión del balón.

Esto será practicado a través de ejercicios de fútbol reducido y situaciones de un toque, con el objetivo de pulir las habilidades individuales y colectivas del equipo.

En este sentido, el entrenador considera fundamental que sus jugadores recuperen su ‘vuelo futbolístico’, una característica esencial que les permitió sobresalir en las competiciones pasadas.

El Hilton de Pilar, equipado con instalaciones deportivas de primer nivel, incluido un campo de golf, spa, piscinas y un gimnasio, ha sido un lugar recurrente para las concentraciones del club.

De hecho, fue aquí donde el plantel se preparó para la histórica conquista de la Copa Libertadores en 2019. Esta vez, aunque los entrenamientos estén bien dirigidos, Gallardo deberá afrontar la ausencia de varios jugadores que se han unido a sus selecciones nacionales.

Entre los convocados se encuentran Germán Pezzella y Marcos Acuña, que estarán representando a Argentina, así como Paulo Díaz, que se unió a la selección chilena.

Además, Adam Bareiro y Nicolás Fonseca también se han sumado a las filas de Paraguay y Uruguay, respectivamente.

A pesar de estas ausencias, el tiempo de trabajo que Gallardo tiene por delante será crucial para establecer una base sólida física y futbolísticamente, que le permita afrontar de manera competitiva tanto la Copa Libertadores como la Liga Profesional en los próximos meses.

La decisión de concentrarse intensamente muestra la ambición del club por regresar a los primeros planos del fútbol argentino e internacional.