El equipo de Carlo Ancelotti logró una victoria crucial en la ida del repechaje para acceder a los octavos de final de la Champions League.
La relación entre el Real Madrid y la Champions League es sin duda alguna una de las más emocionantes en el mundo del fútbol. Este vínculo se hizo evidente nuevamente el pasado martes cuando el equipo dirigido por Carlo Ancelotti logró una emocionante victoria de 3-2 ante el Manchester City en Inglaterra, en el partido de ida del repechaje para acceder a los octavos de final.
A pesar de comenzar perdiendo en dos ocasiones, los madridistas mostraron una gran resiliencia y están muy cerca de alcanzar la siguiente ronda. La vuelta se disputará el miércoles 19 de octubre en el estadio Santiago Bernabéu, donde el equipo aspira a conquistar su 16ª copa de la UEFA.
En el marco de este enfrentamiento, Pep Guardiola, reconocido como uno de los mejores entrenadores de la historia del fútbol, se presentó ante el reto de superar al histórico Real Madrid.
Sin embargo, el Manchester City estaba atravesando una de sus peores temporadas desde la llegada de Guardiola en 2016, lo que aumentaba la presión sobre su desempeño en el encuentro.
Para este partido, el técnico español ideó una táctica novedosa, alineando a su defensa de una manera poco convencional, que incluía a John Stones como el volante central en un bloque defensivo compuesto por cinco hombres.
Este enfoque dio resultados a momentos, aunque el ataque del Real Madrid, liderado por las estrellas Vinícius Júnior y Kylian Mbappé, logró generar múltiples ocasiones.
Aunque el inicio del partido fue complicado para los españoles, que se fueron al descanso perdiendo 0-1, supieron reaccionar y mejorar su actuación en la segunda parte.
Uno de los momentos decisivos del encuentro llegó cuando Vinícius empató el partido con un gol sorprendente, un tiro que desconcertó al portero Ederson.
Sin embargo, el City recuperó la ventaja momentáneamente con un gol de penal de Erling Haaland. A pesar de esto, el Madrid no se dio por vencido y continuó atacando, logrando igualar nuevamente el marcador gracias al gol de Brahim Díaz en el minuto 85.
Finalmente, Jude Bellingham selló la victoria con el tercer gol después de una brillante jugada colectiva.
El encuentro no solo fue una muestra de la calidad del fútbol moderno, sino que también revivió la mística de la Casa Blanca, conocida por su capacidad de superar adversidades.
Con esta victoria, el Real Madrid espera consolidar su superioridad en la vuelta y reafirmar su estatus como uno de los grandes de la Champions League.
Por su parte, en otros partidos destacados de la jornada de Champions, el París Saint-Germain y el Borussia Dortmund también consiguieron importantes victorias que los acercan a los octavos de final.
El PSG, liderado por Ousmane Dembélé, obtuvo una clara victoria de 3-0 ante el Brest, poniendo un pie en la siguiente ronda. Asimismo, el Dortmund goleó al Sporting de Lisboa, reafirmando su posición en la competencia.
Con un panorama emocionante de cara a los partidos de vuelta, los aficionados del fútbol esperan una semana llena de emociones en la Champions League.
