Diego Milito se convierte en el nuevo presidente de Racing Club y ya enfrenta retos significativos, desde la continuidad del entrenador Gustavo Costas hasta la mejora de infraestructuras en el club.
Diego Milito ha sido elegido presidente de Racing Club por un margen de casi 3.500 votos, lo que le permitirá liderar la institución durante los próximos cuatro años.
Milito asumirá oficialmente el cargo este jueves, con una serie de desafíos que deberá abordar desde el primer día.
Uno de los más relevantes es la continuidad del entrenador Gustavo Costas, quien llevó a la Academia a la victoria en la Copa Sudamericana.
Milito, junto a su director deportivo Sebastián Saja, se reunirá con Costas para discutir su futuro en el club.
A pesar de la intención de Milito de mantener a Costas en su puesto, se ha señalado que no es el tipo de entrenador que ambos consideran ideal, ya que buscan un perfil más moderno en el cuerpo técnico.
Sin embargo, Saja ha elogiado el trabajo de Costas, afirmando que su desempeño durante la Copa Sudamericana ha sido convincente para continuar al frente del equipo.
Por otro lado, también se deberá considerar el contrato económico para Costas si decide quedarse en el club hasta 2025. A pesar de sus éxitos recientes, Costas se ha mostrado cauteloso en esta cuestión, afirmando que su único enfoque es hacer lo mejor para Racing, sin centrarse en su posible salida o permanencia.
Además de Costas, hay varios jugadores en situaciones contractuales inciertas, como Juan Fernando Quintero, Roger Martínez y Maravilla Martínez.
Quintero parece decidido a dejar el club a pesar de un año restante de contrato y ha dejado pistas en sus redes sociales sobre su despedida.
El caso de Roger es complejo, ya que su contrato se extingue a fin de mes y ha recibido propuestas, lo que requerirá un esfuerzo por parte del equipo directivo para convencerlo de permanecer en el club.
Finalmente, Maravilla Martínez aspira a un aumento salarial significativo o buscar una transferencia al extranjero, lo que podría complicar su permanencia.
En cuanto a los planes inmediatos, Milito tendrá la oportunidad de elevar el nivel del equipo, que ha alcanzado un nuevo estatus tras su triunfo en la Sudamericana.
Racing enfrentará importantes compromisos internacionales, comenzando por la Recopa Sudamericana contra Botafogo, campeón de la Copa Libertadores, programada para febrero.
En estas competiciones, el objetivo es superar los cuartos de final, una barrera que ha sido un obstáculo en los últimos años.
A través de una adecuada incorporación de refuerzos de calidad, Racing tratará de consolidarse como uno de los grandes del fútbol argentino, desafiando a clubes como River y Boca.
Además, otro de los puntos destacados en la campaña de Milito fue la mejora de la infraestructura.
Racing cuenta con el predio de Tita Mattiussi y uno en Ezeiza, cuya expansión se planea para facilitar los entrenamientos del plantel.
También se espera modernizar el estadio, un aspecto que fue objeto de críticas en la campaña anterior.
Finalmente, incrementar el número de socios es un objetivo primordial para Milito, quien aspira a acercar la masa societaria de Racing a la de sus rivales.
Actualmente, Racing cuenta con cerca de 100.000 socios, de los cuales 37.360 estaban habilitados para votar.
Para lograr este aumento, se planea modernizar el club en todas sus áreas, buscando así atraer más simpatizantes y sponsors.