Con una destacada actuación de Alejandro Garnacho y un contundente 5-2, el Manchester United avanza a cuartos de final de la Carabao Cup.

El regreso a la acción del Manchester United fue todo un espectáculo.

En una noche mágica en Old Trafford, el equipo de los Diablos Rojos celebró un emocionante debut como técnico interino de Ruud Van Nistelrooy, al vencer al Leicester City con un abultado marcador de 5-2 en la Carabao Cup.

La actuación de Alejandro Garnacho fue clave en este triunfo, aportando tanto un gol como una asistencia en un momento en que su equipo más lo necesitaba.

Tras la reciente salida de Erik ten Hag, el United llegaba a este partido en medio de una tormenta de dudas, ya que en la liga local no había podido exhibir su potencial.

Sin embargo, este triunfo pareció disipar el luto por la marcha de su anterior entrenador.

Con la victoria, el equipo se clasifica a los cuartos de final de la Copa de la Liga, donde se medirá ante el Tottenham, que llegó a esta fase tras eliminar al Manchester City.

La atmósfera en el famoso 'Teatro de los Sueños' era electrizante.

Desde el inicio, los aficionados desbordaron su apoyo hacia Van Nistelrooy, quien recibió una cálida bienvenida a pesar de estar en un papel transitorio.

Sin embargo, la incertidumbre sobre el rendimiento del equipo estaba palpable en el aire, creando tensiones entre los seguidores.

A los 15 minutos, un golazo de Casemiro, un verdadero misil que se coló en el ángulo del arco defendido por Danny Ward, encendió el entusiasmo en las gradas.

Garnacho jugó un papel crucial en esta jugada, al conducir el balón hacia el centro y asistir en el momento justo.

La explosión de júbilo fue monumental tras la conquista inicial.

El conjunto local no se detuvo allí. Poco después, Garnacho amplió la ventaja con un sutil toque que le permitió marcar el segundo gol, tras un brillante centro de Diogo Dalot y una buena combinación de juego.

El partido parecía estar dominado por un United que mostraba una imagen completamente renovada.

A pesar de que el Leicester logró descontar rápidamente con una espectacular volea de Bilal El Khannouss, el United respondió casi de inmediato.

Bruno Fernandes anotó el tercer gol tras una falta y Casemiro volvió a ser protagonista sellando su doblete, aprovechando el rechace del balón en la portería tras un cabezazo de Rashford que dio en el palo.

Antes del descanso, Conor Coady recortó distancias con el gol que marcó el 4-2, aunque dejó una pequeña esperanza para su equipo.

La primera mitad fue un desfile de goles que mantuvo a los espectadores al borde de sus asientos.

En la segunda parte, la intensidad del juego disminuyó notablemente.

Sin embargo, Bruno Fernandes se encargó de aumentar la cuenta con un gol que completó su doblete, esta vez tras regatear al portero después de recibir un pase que le dejó frente a la portería vacía.

Así, el United cerró la noche con un contundente 5-2, dejando ver que, a pesar de las dificultades recientes, estaba listo para continuar su camino en la competición.