El equipo de Guardiola avanzó a la final de la FA Cup tras vencer a Nottingham Forest, en medio de una campaña marcada por altibajos y expectativas no cumplidas en la Premier League y Champions League.
En un día en el que Manchester City fue oficialmente destituido como campeón de la Premier League, el conjunto dirigido por Pep Guardiola logró avanzar a la final de la FA Cup por tercer año consecutivo tras vencer 2-0 a Nottingham Forest en Wembley.
Este resultado representa una pequeña luz en medio de una temporada que ha sido calificada como una de las más decepcionantes en la historia reciente del club, marcada por expectativas altas y un rendimiento por debajo de lo esperado.
El partido fue dominado en sus momentos clave por los Citizens, quienes anotaron en cada mitad del encuentro. Rico Lewis abrió el marcador en el minuto 2, aprovechando una asistencia de Mateo Kovacic, quien estuvo activo en la creación de juego desde el inicio.
Apenas unos minutos después, en el minuto 51, Josko Gvardiol amplió la diferencia con un remate de cabeza tras un tiro de esquina, consolidando así la ventaja del equipo.
A pesar de que Forest intentó reaccionar, pegando en el travesaño en varias ocasiones, no logró anotar y se quedó con las manos vacías en su semifinal de la FA Cup, que no disputaba desde 1991.
Este triunfo ofrece a Guardiola y su plantilla la oportunidad de rescatar algo de una campaña que ha sido difícil desde el inicio. La esperanza de conquistar el título de la FA Cup se suma a la eliminación temprana en la Champions League y a la pérdida del liderato en la Premier, que actualmente ocupa Liverpool.
A pesar de estas dificultades, el equipo mantiene la ilusión de cerrar la temporada con un título, enfrentándose al Crystal Palace en la final prevista para el 17 de mayo.
El mediocampista Mateo Kovacic, quien participó en la jugada del primer gol, expresó su satisfacción por haber logrado avanzar a la final: “A pesar de que la temporada no ha sido la que queríamos, aún tenemos la oportunidad de terminarla de manera positiva en la FA Cup.
Es importante cerrar bien y con fuerza.”
Por otro lado, Guardiola no se mostró satisfecho con el rendimiento general del equipo durante la temporada. En una declaración contundente, el entrenador español afirmó: “No, no ha sido una buena temporada. Estamos a mil millones de puntos de Liverpool, y aunque ganar la FA Cup aliviaría un poco la situación, no cambia la realidad de que no hemos cumplido con nuestras expectativas.” Actualmente, City se encuentra a 21 puntos del líder Liverpool en la Premier, y su prioridad ahora es asegurar un puesto en la próxima Liga de Campeones, para lo cual aún deben luchar en las últimas jornadas.
En el lado de Nottingham Forest, el técnico Nuno Espírito Santo afirmó que el equipo tiene mucho por lo que luchar en las próximas semanas: “Mañana saldremos a luchar desde cero, todavía queda mucho por delante y debemos mantener la motivación pese a esta derrota.”
En cuanto al ambiente en Wembley, se notó cierto desánimo entre la afición de City, con aproximadamente 5,000 asientos vacíos en la sección de los seguidores en azul celeste.
Sin embargo, los pocos que asistieron tuvieron motivos para celebrar, al ver cómo su equipo aseguró una final que puede significar un pequeño respiro en medio de una temporada difícil.
El partido comenzó con un City dominante, donde Rico Lewis encontró el arco en el minuto 2 tras un pase de Kovacic. Forest, por su parte, tuvo pocas oportunidades en la primera mitad, aunque intentó reaccionar tras el descanso. Anthony Elanga, en su primer contacto tras ingresar en el segundo tiempo, estuvo cerca de marcar, pero su disparo fue desviado por el arquero Stefan Ortega.
La segunda mitad fue de dominio del City, que logró el segundo tanto tras una jugada en la que el portero de Forest, Matz Sels, realizó varias paradas en rápida sucesión.
La defensa de Forest se mantuvo sólida en ocasiones, pero no pudo evitar que Gvardiol rematara de cabeza en una jugada que se resolvió tras una revisión del VAR.
En los minutos finales, Forest intentó acortar distancias, pero los disparos de Morgan Gibbs-White y Taiwo Awoniyi se estrellaron en los postes, y Ortega evitó el gol en varias ocasiones.
Gibbs-White, autor de las mejores oportunidades del equipo visitante, lamentó no haber podido concretar: “Es muy frustrante. Creo que tuvimos nuestras oportunidades, pero no logramos convertir. La sensación es que no fue nuestro día.”
Este resultado marca un momento de reflexión para ambos clubes: Manchester City busca cerrar la temporada con un título que pueda aliviar la decepción, mientras Nottingham Forest aspira a seguir peleando por un puesto que los acerque a competiciones europeas en la próxima campaña.
La final de la FA Cup promete ser un duelo emotivo y una oportunidad para que los equipos salden sus cuentas en un año lleno de altibajos.
