La violencia de la barra brava de Godoy Cruz suspende el encuentro con San Lorenzo en Mendoza
En la fría y lluviosa tarde del sábado en Mendoza, los violentos lograron su cometido.
En el estadio Malvinas Argentinas, la barra brava de Godoy Cruz provocó la suspensión del partido contra San Lorenzo, debido a la cantidad de proyectiles arrojados desde la tribuna y los serios enfrentamientos con la policía.
El árbitro Nazareno Arasa decidió detener el encuentro a los 7 minutos del segundo tiempo ante la gravedad de la situación.
Por el momento, el Tribunal de Disciplina de la AFA no ha tomado una decisión definitiva.
La dirigencia de San Lorenzo, liderada por Marcelo Moretti, solicitará formalmente la adjudicación de los tres puntos, a pesar de que el duelo estaba empatado 1-1 al momento de la suspensión.
Los dirigentes del club se basarán en el artículo 80 del reglamento, que contempla sanciones económicas y pérdida de puntos en casos de disturbios graves que impidan la continuidad del partido.
Los daños materiales en el estadio, como la destrucción de baños por parte de los barras, también serán citados como argumento para el reclamo.
Por otro lado, la dirigencia azulgrana hará hincapié en el elevado costo del viaje a Mendoza (alrededor de 70 mil dólares), gastos que deberían repetirse si se reanuda el encuentro.
La AFA ha sido tradicionalmente reacia a otorgar puntos por reclamos administrativos, pero San Lorenzo sostiene que si los puntos se le dan a Godoy Cruz, deberían ser para ellos, ya que les impediría ganar en el campo.
La posibilidad de completar el partido en terreno neutral surge como una opción, aunque el calendario ajustado complica la reprogramación de los 38 minutos restantes.