En el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza se disputaba un encuentro crucial entre Godoy Cruz y Talleres, ya que ambos equipos llegaban con la necesidad de sumar puntos para no alejarse de la parte alta de la tabla y aspirar a la clasificación para la Copa Libertadores 2025. Ambos conjuntos llegaban con la misma cantidad de puntos y sabían que el triunfo podría marcar la diferencia en esta etapa del campeonato.

Desde el inicio del partido, se pudo observar una dinámica intensa donde la pelota circulaba rápidamente de un lado a otro, similar a un agitado partido de ping-pong.

La presión por conseguir los tres puntos era evidente tras haber sufrido derrotas en la jornada anterior.

Godoy Cruz fue el primero en poner en aprietos a su rival, generando un par de ocasiones claras con remates de Roberto Fernández y un cabezazo de Martín Pino.

No obstante, el arco de Talleres estuvo bien defendido por Franco Petroli, quien tuvo intervenciones destacadas al desbaratar los intentos de Galarza y Rodríguez, mostrando reflejos felinos para mantener su portería a cero.

A medida que transcurría el primer tiempo, ambos equipos se alternaban en la búsqueda de marcar, sin que ninguno lograra hacerse con el control absoluto del juego.

Ya en el segundo tiempo, fue Talleres quien encontró el camino para la victoria.

A pesar de que la intensidad del juego parecía haber disminuido en los primeros minutos del complemento, los cordobeses lograron abrir el marcador con un gol de Matías Galarza.

El tanto llegó tras un preciso centro desde la izquierda de Blas Riveros, que encontró a Galarza en el corazón del área.

De un salto, el delantero se adelantó a los defensores de Godoy Cruz y con un cabezazo bien colocado, envió el balón al fondo de la red.

Tras el gol, el entrenador de Godoy Cruz, Oldrá, se vio obligado a realizar cambios.

Ya había incorporado al joven Juan Morán por una molestia de Elías Pereyra antes del descanso, pero tras el gol en contra, realizó cuatro modificaciones más en un intento por revertir la situación.

Sin embargo, la suerte se volvió en contra de Godoy Cruz cuando Roberto Fernández, uno de los pilares del equipo, tuvo que abandonar el campo por una molestia en el isquiotibial, dejando a su equipo con un jugador menos.

En los minutos finales, Talleres supo controlar el encuentro sin mayores complicaciones, asegurando una victoria muy importante que les mantiene en la pelea por la clasificación a la Copa Libertadores.

Con este resultado, el equipo de Córdoba sigue alimentando sus esperanzas de brillar en el torneo continental y demostrar que pueden ser un contendiente serio en el fútbol sudamericano.