Romano Floriani Mussolini, futbolista de 21 años y nieto de Benito Mussolini, busca forjar su carrera lejos de la sombra de su apellido, destacando con el Juve Stabia en la Serie B italiana.
En la actualidad del fútbol italiano, un nombre resuena con particular intensidad: Romano Floriani Mussolini.
A sus 21 años, este joven futbolista carga con el peso de un apellido que está teñido de historia y controversia.
Nieto de Benito Mussolini, el líder del régimen fascista en Italia, Romano ha tomado un camino diferente al de su famosa familia política, concentrándose por completo en su carrera dentro del deporte.
Actualmente, juega como lateral derecho para la Lazio, aunque está cedido al Juve Stabia, que compite en la Serie B de Italia.
En un partido reciente, logró marcar su primer gol como profesional, un momento que no solo fue significativo para su trayectoria, sino que también generó un gran revuelo en el ámbito mediático italiano y más allá. Su tanto fue clave para que el Juve Stabia obtuviera una victoria crucial, elevando la moral del equipo que lucha por ascender a la Serie A.
Sin embargo, el gol de Mussolini se vio envuelto en una polémica que sacó a la luz viejas tensiones sociales en Italia.
Al celebrar el tanto, los hinchas del Juve Stabia vitorearon su nombre, y la megafonía del estadio pronunció con aplomo el «Romano…» seguido de un unísono «¡Mussolini!» por parte de los aficionados, algunos de los cuales realizaron el saludo fascista.
Esto generó un intenso debate en los medios y redes sociales, ya que la historia de su abuelo sigue dividiendo a la sociedad italiana.
En las redes sociales, Romano ha recibido tanto elogios por su performance en el campo como comentarios que evocan su legado familiar.
Algunos seguidores han expresado apoyo al vincular su apellido con períodos de la historia que muchos prefieren olvidar.
"Tu apellido llena un vacío en muchos italianos" y "respetamos a Il Duce" son ejemplos de los mensajes que ha recibido recientemente.
Consciente de su herencia, Romano ha intentado distanciar su carrera profesional de su apellido.
En sus primeros años en el fútbol, prefirió utilizar únicamente el nombre 'Floriani' en sus camisetas y plataformas digitales.
Sin embargo, ha comenzado a aceptar su nombre completo, reconociendo la historia que lleva consigo.
En una entrevista, comentó: "Si mi apellido afecta mi carrera, sería una decepción.
Lo que importa es mi rendimiento en la cancha". También mencionó que, aunque su bisabuelo fue una figura clave en la historia de Italia, su enfoque actual está en el fútbol y en el presente, no en el pasado.
Formado en las divisiones menores de la Roma, a los 13 años se unió a la Lazio, donde fue ascendiendo posiciones hasta llegar al primer equipo.
A pesar de no haber debutado oficialmente en la Serie A, su desempeño en clubes como el Delfino Pescara y ahora el Juve Stabia le ofrece la esperanza de regresar a su club de origen.
Con contrato vigente hasta 2025, Romano Floriani Mussolini busca dejar su propia huella en el mundo del fútbol, un camino que evidentemente está marcado no solo por su talento, sino también por un apellido que ha sido emblemático tanto por sus contribuciones como por sus controversias.