El exfutbolista y actual director técnico, Martín Palermo, toma las riendas de Fortaleza y busca salvar al equipo del descenso en una temporada crucial en el fútbol brasileño.
Tras una carrera como futbolista que le dejó un récord de 298 goles, principalmente en Boca Juniors donde conquistó la Copa Libertadores y la Copa Intercontinental, Palermo ha iniciado su etapa como entrenador con la mira puesta en un desafío monumental: salvar a Fortaleza del #descenso en el Brasileirão.
Su trayectoria como entrenador no es extensa, pero ya cuenta con antecedentes notorios. Fue subcampeón con Platense en Argentina, conquistó el campeonato con Olimpia en Paraguay y ahora busca su mayor logro al intentar mantener a Fortaleza en la Primera División del #fútbol brasileño.
Tomó las riendas del equipo en septiembre de 2025, reemplazando al portugués Renato Paiva, quien había llegado tras la salida de Juan Pablo Vojvoda, el técnico con más partidos en la historia del club.
Al momento de su llegada, Fortaleza atravesaba una fuerte crisis deportiva, ocupando la antepenúltima posición en la tabla con tan solo 15 puntos en 28 jornadas, en zona de descenso.
Los primeros resultados de Palermo no fueron alentadores: en su primer mes, el equipo ganó 3 partidos, pero perdió en 4 oportunidades, dejando en claro que aún había mucho por trabajar.
Sin embargo, tras una serie de partidos en la que supo mantenerse invicto desde la fecha 29, con un empate y varias victorias, el equipo ha mejorado su rendimiento y ahora respira con algo más de tranquilidad.
El principal éxito reciente fue la victoria con gol de Adam Bareiro, el delantero paraguayo, quien anotó su quinto tanto en las últimas cinco jornadas.
Fortaleza alcanzó 37 puntos
Con esta victoria, Fortaleza alcanzó 37 puntos, situándose en la posición 18 del torneo, two puntos por encima del equipo que ocupa el puesto 17, que en su caso es Vitória y actualmente se encuentra fuera de la zona de descenso.
La agónica lucha para mantenerse en la máxima categoría brasileña continúa, y Palermo confía en que su trabajo puede dar frutos en las próximas semanas.
El desafío que tiene por delante es enorme, ya que en las próximas jornadas el equipo enfrentará a rivales de peso como Atlético Mineiro, Corinthians y Botafogo, en partidos donde cada punto será vital para asegurar la permanencia.
