El Manchester United sufrió una de las derrotas más humillantes de su historia al ser eliminado en la segunda fase de la Copa de la Liga inglesa por el modesto Grimsby Town, tras una dramática tanda de penales en el estadio Blundell Park. La victoria del equipo de la Cuarta División copó los titulares y dejó a los 'Red Devils' en una situación de crisis profunda.
El pasado miércoles, los 'Diablos Rojos' fueron eliminados por el Grimsby Town, un equipo que actualmente compite en la cuarta división del #fútbol en Inglaterra, en un partido que se definió en una dramática tanda de penales y que dejó en evidencia la crisis que atraviesa la institución.
Este sorprendente resultado se produjo en un escenario marcado por condiciones climáticas adversas, con lluvias torrenciales que dificultaron el juego y un campo de juego impracticable.
Manchester United, con un plantel valuado en cerca de 50 millones de libras esterlinas (aproximadamente 56 millones de euros), comenzó dominando y logró una ventaja temprana de 2-0 en apenas ocho minutos.
Los goles fueron obra del francés Manuel Ugarte y del brasileño Matheus Cunha, pero la alegría duró poco.
El Grimsby Town, un equipo con una fracción del presupuesto del conjunto visitante, no se dio por vencido y en la segunda mitad logró empatar el encuentro, primero con un remate preciso de Charles Vernam y luego con un gol que fue polémico por una mano y que el árbitro validó por falta de VAR.
La resistencia del humilde conjunto inglés se mantuvo, y en la recta final, Bryan Mbeumo, que ingresó del banco, acortó distancias con un disparo potente desde fuera del área.
El partido se tornó dramático. Con el United buscando un gol que asegurara su pase, Harry Maguire logró empatar en los últimos minutos, llevando el duelo a la tanda de penales. Allí, la suerte no estuvo del lado de los 'Red Devils'. El arquero del Grimsby, Pym, fue fundamental, deteniendo varios disparos y permitiendo que su equipo lograra la histórica clasificación tras una tanda interminable y de infarto, que finalizó 12-11 en favor del conjunto de la Cuarta División.
La derrota de #Manchester United no solo implica una eliminación
La derrota de Manchester United no solo implica una eliminación, sino también un golpe anímico que se suma a otros inconvenientes recientes, como la posible salida del arquero argentino Alejandro Garnacho hacia el Chelsea y la recuperación de Lisandro Martínez de una lesión en la rodilla.
La crisis en Old Trafford ha llevado a que los aficionados y expertos temen por la estabilidad del club en un momento crítico.
Es importante recordar que esta no es la primera vez que un equipo del nivel del United sufre un revés tan humillante en esta competencia. En 2014, fueron eliminados por el MK Dons en la misma instancia, con un marcador de 4-0. La dimensión histórica de esta derrota pone en duda la gestión y planificación del club, que en los últimos años ha enfrentado cambios de entrenador, altas inversiones y altas expectativas que no se han materializado en resultados consistentes.
Desde el punto de vista financiero, el valor del plantel y los costos asociados a la plantilla de Manchester United alcanzan cifras multimillonarias, pero parecen no ser suficientes para evitar estos bochornos deportivos.
La actuación en el campo y la eliminación ante un equipo mucho menor en presupuesto han abierto un debate sobre la gestión deportiva y la calidad del proyecto que lidera Rúben Amorim, que actualmente se encuentra en una situación de incertidumbre.
En definitiva, este enfrentamiento quedará registrado como una de las noches más amargas en la historia del Manchester United, que buscará levantar cabeza en próximas competiciones, mientras que el #Grimsby Town celebra una de las gestas más recordadas en su historia moderna.
