El arquero costarricense Keylor Navas no continuará en Newell's debido a su negativa a jugar como suplente y una oferta mejorada del fútbol mexicano. La situación genera incertidumbre en el club rosarino, que busca vender su pase en torno a los 2.700.000 euros.
La situación se ha avivado en las últimas semanas después de que Navas se negara a atajar en el partido contra Banfield y pidiera ser apartado del equipo, una decisión que impactó tanto en su relación con la dirigencia como con el cuerpo técnico.
Desde el entorno del propio club, trascendió que Navas no quería ser suplente en ningún partido y que, ante esa negativa, el técnico Sebastián Fabbiani optó por no incluirlo en el banco de suplentes en el último encuentro.
En su lugar, llamó a Faustino Piottim, un joven arquero que no estaba concentrado y que fue utilizado en esa posición en un acto que generó cierta polémica.
La principal razón que movería a Navas a tomar estas decisiones es su interés por facilitar su transferencia al #fútbol mexicano
La principal razón que movería a Navas a tomar estas decisiones es su interés por facilitar su transferencia al fútbol mexicano, donde los Pumas de Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) intensificaron las negociaciones.
En la liga mexicana, la oferta inicial por el arquero costarricense fue de aproximadamente 1 millón de dólares, alrededor de 870.000 euros, pero recientemente se incrementó a una cifra cercana a 2.300.000 dólares (unos 2 millones de euros). Sin embargo, la institución rosarina mantiene su postura y exige unos 3 millones de dólares, unos 2.700.000 euros, por la venta del futbolista.
Este episodio se convirtió en una especie de presión por parte de Navas para facilitar su salida, dado que desea continuar su carrera en el extranjero.
La misma situación se vio reflejada cuando, a pesar de haber sido desactivado del plantel, ingresó a hacer la entrada en calor antes del partido y firmó autógrafos a los hinchas, demostrando su buena disposición en diferentes momentos.
También se conoció que Navas no participó en la primera fecha del torneo contra Independiente Rivadavia en Mendoza, lo que generó especulaciones sobre su estado físico o su rol en el equipo en ese momento.
Tras ese partido, el arquero viajó de regreso a Rosario en un vuelo chárter junto a sus compañeros y publicó un mensaje en Instagram en el que agradeció las muestras de apoyo y explicó que había sufrido una serie de malestares, como vómitos y molestias estomacales, que le impidieron estar en el campo.
El propio Navas comentó en su publicación: “Después de un día terrible con vómito y malestar estomacal, gracias a Dios se sacaron los 3 puntos.
Ahora a seguir las indicaciones médicas para estar bien lo antes posible. Gracias a todos por sus mensajes de apoyo”. Sin embargo, la situación no mejoró mucho con el paso del tiempo. La tensión se incrementó y las negociaciones con los Pumas avanzaron de manera significativa. La posible salida del arquero, quien además tiene 38 años y una larga carrera en Europa, incluidos pasos por Real Madrid, PSG y Sevilla, está casi concretada.
En los próximos días, se espera que se oficialice su transferencia, que sería una de las más importantes en la historia reciente del club rosarino.
La partida de Navas marcaría un capítulo importante en su carrera, ya que su llegada en marzo anterior generó gran expectativa y revivió la confianza en la institución.
