El ambiente estaba cargado de tensión en el encuentro entre Midland y Excursionistas por los cuartos de final del reducido que busca definir el ascenso de la B Metropolitana a la Primera Nacional.

El partido, que prometía ser emocionante, se tornó muy caliente cerca del final de la primera mitad.

A los 44 minutos de juego, cuando Midland se disponía a ejecutar un tiro de esquina, se produjo un altercado entre los jugadores.

Mayola, defensor de Midland, mantenía una ardiente disputa con Barrios, un jugador de Excursionistas, lo que llevó a que cayera al suelo.

Tras levantarse, visiblemente alterado, Mayola se cruzó en el camino de Gian Zoratti, quien se sumaba a la jugada.

En un choque desafortunado, Mayola impactó directamente en el rostro de Zoratti, quien cayó instantáneamente al césped.

Los gritos y reclamos para el árbitro no se hicieron esperar: "¡Le bajó los dientes!", se escuchó en las gradas mientras Zoratti permanecía tendido.

La situación se tornó más crítica cuando el personal médico se acercó, constatando la gravedad de la acción.

Cuando el médico le colocó un cuello ortopédico a Zoratti, quedó claro que no era un incidente menor.

Después de ser retirado en camilla, Zoratti fue trasladado de inmediato al hospital, mientras los asistentes médicos intentaban localizar las piezas dentales que había perdido a causa del golpe.

Por su parte, el árbitro no dudó en exhibir la tarjeta roja a Mayola, quien se retiró del campo bajo el gesto de un puño por parte del juez, señalando que el impacto había sido deliberado.

El partido se reanudó, aunque el clima ya no fue el mismo y el espectáculo futbolístico se vio afectado.

A pesar de que ambos equipos lucharon por abrir el marcador, la primera mitad culminó sin goles.

En el encuentro de ida, el marcador había sido 1-1, lo que significaba que las emociones estaban escalando hacia una definición desde el punto penal.

Finalmente, el encuentro concluyó con un empate a cero y ambas escuadras se dirigieron a la tanda de penaltis.

La fortuna sonrió a Excursionistas, que logró avanzar a las semifinales tras una vibrante serie de penaltis que terminó 4-3 a su favor.

De esta forma, el incidente con Zoratti quedará en la memoria no solo por su gravedad, sino también por el impacto que tuvo en el desarrollo y resultado del partido.

La historia del fútbol argentino ha estado llena de situaciones similares, donde la intensidad de la competición y la pasión de los hinchas a menudo juegan un papel fundamental, llevándonos a recordar que, más allá de la competencia, la seguridad de los jugadores siempre debe estar en primer plano.