Mauro Icardi, tras superar una lesión, mostró nuevamente su mejor versión en Galatasaray: anotó en la victoria 3-0 frente a Kasimpasa y se convirtió en el máximo goleador extranjero del club en la liga turca.
En lo que va de la temporada, el delantero argentino acumula ocho goles en 22 compromisos de la Süper Lig, una cifra que refleja una recuperación efectiva y una confianza que parece haber retornado con fuerza.
El triunfo del Cimbom ante Kasimpasa, por 3-0, correspondiente a la 17ª jornada de la #Trendyol Süper Lig, confirmó que el delantero está en plena forma.
Icardi disputó los 90 minutos y se erigió como protagonista de un gol que no solo amplió la ventaja de su equipo, sino que además dejó una marca personal de alto impacto.
Con el marcador 2-0, y faltando apenas minutos para el final, Icardi recibió cerca del vértice izquierdo del área, realizó dos recortes para quitarse de encima a dos defensores y, ya posicionado para rematar, conectó un derechazo que se coló por el palo derecho del portero Andreas Gianniotis para sellar la victoria.
Este tanto consolidó a #Galatasaray en la cima de la clasificación, fortaleciendo una de las campañas más ambiciosas de la década en la liga turca.
Más allá de la anotación, el gol tiene un doble significado: Icardi se convirtió en el extranjero con más goles en la historia del club en la liga, superando a Gheorghe Hagi, quien mantenía ese récord con 59 tantos.
Este hito añade una nueva página a la trayectoria del delantero, que ha sabido convertir la experiencia acumulada en un rendimiento constante para su equipo.
La buena racha llega después de un periodo complicado por la lesión de rodilla y las molestias que obligaron a un proceso de recuperación durante el primer tramo de la temporada.
Su regreso coincide con un pico de confianza en el vestuario y con una sociedad productiva que ha forjado con los mediocampistas y extremos del Galatasaray
Su regreso coincide con un pico de confianza en el vestuario y con una sociedad productiva que ha forjado con los mediocampistas y extremos del Galatasaray.
En el entorno del club se destaca una mezcla de juventud y veteranía que ha sido clave para sostener el rendimiento durante la campaña.
Antes de su llegada a Estambul, Icardi había dejado huella en clubes de renombre europeo, como Inter de Milán y Paris Saint-Germain, lo que le ha permitido aportar experiencia en competiciones exigentes y un olfato goleador en momentos decisivos.
Su presencia en Galatasaray ha reforzado la identidad ofensiva del equipo y ha levantado las expectativas de cara a las etapas finales de la temporada.
Con las jornadas restantes para completar la fase decisiva, Galatasaray ya muestra un perfil de candidato serio para el título y para avanzar en las competencias europeas.
