Gianni Infantino, presidente de la FIFA, dio inicio a una nueva edición del Olé Sports Summit, un evento destacado que reúne a expertos de renombre en marketing y la industria del deporte.

Durante la ceremonia de apertura, Infantino se dirigió a los asistentes con un cálido agradecimiento y una reflexión sobre la importancia de la prensa deportiva en Latinoamérica.

"Es un placer y un honor dirigirme a todos ustedes.

Quiero disculparme por no estar presente físicamente.

Olé ha emergido como un referente en el mundo de la prensa deportiva, no solo en Argentina, sino en toda Latinoamérica", subrayó el presidente de la FIFA.

Más allá de dar inicio al evento, Infantino abordó varios temas de relevancia, como la futura Copa del Mundo de Clubes y su visión sobre las Eliminatorias Sudamericanas.

Resaltó la significancia de la Selección Argentina y su impacto global: "Sudamérica tendrá un rol crucial en el Mundial de 2026, especialmente considerando que habrá entre seis y siete plazas disponibles tras la ampliación a 48 selecciones", explicó Infantino, agregando que los pronósticos negativos previos sobre el aumento de cupos habían sido desmentidos por la participación activa de las diez selecciones sudamericanas.

El mandatario también se refirió a la aclamada rivalidad entre Boca Juniors y River Plate y su participación en los eventos deportivos internacionales.

"La rivalidad entre Boca y River es reconocida en todo el planeta y será emocionante tenerlos ambos en Estados Unidos", comentó, refiriéndose a la próxima Copa del Mundo de Clubes, que promete ser un evento innovador y atractivo para los aficionados al fútbol.

Infantino no dejó de lado los logros recientes de la Selección Argentina bajo la dirección de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). "Felicitaciones al fútbol argentino por la magnífica organización del Mundial Sub 20 y por los títulos recientes de la Copa América", expresó, mientras también anticipó que el camino hacia el futuro implicará grandes retos para superar estas exitosas gestas.

Con una mirada optimista hacia el Mundial de Clubes, Infantino detalló que este torneo redefinirá la forma en que se consagran los campeones, ofreciendo más oportunidades a talentos emergentes.

"Se tratará de una competición inclusiva y basada en el mérito.

Este torneo no solo será una vitrina para los clubes, sino que también ofrecerá un espacio para aquellos grandes jugadores que antes no tuvieron la oportunidad de demostrar su valía en un escenario mundial", afirmó.

A medida que se acercan las Eliminatorias y las competencias internacional, Infantino hizo un llamado a todos los equipos sudamericanos que han logrado clasificar para la edición de 2025, deseándoles la mejor de las suertes.

Entre ellos, mencionó a los clubes más emblemáticos como Boca Juniors, River Plate, Flamengo y Palmeiras, prometiendo un espectáculo inolvidable para los aficionados.

Antes de concluir su intervención, Infantino compartió su deseo de ver un enfrentamiento entre los grandes rivales del fútbol argentino en el Mundial de Clubes.

"Quién sabe, quizás podamos asistir a un duelo entre Boca y River en las fases finales de esta competición", concluyó, dejando a los aficionados con altas expectativas sobre el futuro del fútbol sudamericano en el ámbito internacional.