Análisis sobre la salida de Luca Scarlato de River Plate y la influencia de representantes en el fútbol formativo, con montos convertidos a euros y antecedentes de casos similares que muestran un patrón en la transferencia de juveniles.
Según el relato de contactos cercanos al entorno del jugador, la decisión de desvincularse de River se habría producido en condiciones que apuntan a un acuerdo económico previo más allá de los aspectos estrictamente deportivos, lo que alimenta la polémica sobre la compensación que deben recibir los clubes que invierten en la formación de una ficha de proyección internacional.
En River, como en muchos otros clubes de la región, la ausencia de un resarcimiento económico por formaciones prolongadas ha sido motivo de críticas y de planteos reenviados a esferas de regulación del #fútbol formativo.
Guastadisegno, representante de futbolistas, volvió a ocupar un lugar central en este episodio. No es la primera vez que el agente aparece vinculado a movimientos de #juveniles que luego migran a mercados extranjeros, y los antecedentes citados por dirigentes y personas del ámbito formativo refuerzan la idea de un patrón que se repite: jóvenes que crecen en clubes formadores y que, a través de gestiones de representantes, encaminan su salida sin que el club reciba una compensación económica significativa.
Entre los casos que se mencionan figura Matías Soulé, quien dejó Vélez a los 15 años para incorporarse a Juventus; también se recuerda a Joaquín Panichelli, surgido de River y hoy figura de alto rendimiento en el fútbol europeo, concretamente en la Ligue 1, con trayectoria en el Racing de Estrasburgo.
En estos movimientos también participó Darío Bombini, figura histórica en la #representación de jugadores como Leonardo Ponzio y Germán Pezzella, y vinculado a #Guastadisegno en distintas operaciones.
Este contexto alimenta la lectura de que la salida de Scarlato podría haber estado motivada, en parte, por un acuerdo económico previo más que por una decisión estrictamente deportiva.
El caso concreto de Scarlato
De acuerdo con fuentes cercanas, el representante habría ofrecido un incentivo de aproximadamente 184.000 euros a la madre del futbolista para evitar que este firmara un contrato profesional con River, a pesar de las propuestas y proyectos formales que la institución presentó durante 2025.
Si estas versiones se confirman, la salida no habría respondido únicamente a razones deportivas, sino a un acuerdo económico previo que habría condicionado la decisión del joven y de su familia.
Este tipo de maniobra, de existir, alimenta las dudas sobre la transparencia de los procesos de salida de juveniles y la necesidad de salvaguardar las aristas formativas frente a intereses comerciales.
Facturación y perfil patrimonial del representante
Guastadisegno
Guastadisegno, según su actividad declarada ante autoridades fiscales, se presenta como “servicios empresariales n.c.p.”, y sus ingresos provendrían, en gran medida, de operaciones vinculadas a la representación de futbolistas en mercados como Italia, España, Inglaterra, Estados Unidos, México y Brasil.
Registros comerciales y fiscales señalan que, durante 2025, su facturación en el extranjero superó el millón de dólares, cifra que equivale a unos 920.000 euros aproximadamente, aunque opera con una estructura mínima, con apenas dos empleados declarados. Ante estas cifras, fuentes del ámbito administrativo señalan que el agente fue fiscalizado en más de una oportunidad, detectándose diferencias entre movimientos bancarios y lo declarado, así como inconsistencias en la facturación electrónica y desajustes relevantes.
No existen, por el momento, causas judiciales públicas asociadas a estas irregularidades.
Un vínculo internacional que configura la estrategia de colocación
En el plano internacional, #Roc Nation —la agencia con base en Brasil que mantiene vínculos operativos con Guastadisegno— figura como un factor clave en la estrategia de colocación rápida de juveniles, incluso antes de la firma de su primer contrato profesional en Argentina.
Bajo este esquema se habría intentado desviar operaciones como la de Santino Andino, cuyo arribo a River se frustró ante la intención de trasladarlo a ligas italianas o brasileñas.
En el caso de Scarlato, el jugador aparece vinculado a posibles destinos como Parma, en Italia, lo que refuerza la imagen de que el club de Núñez podría perder terreno frente a maniobras mercantiles que, según las fuentes consultadas, benefician a intermediarios por encima de los intereses formativos.
Reflexión sobre el sistema formativo y sus desafíos
Este episodio reabre el debate sobre la regulación de las salidas de juveniles y la necesidad de evitar que la presión por el desarrollo de talento se traduzca en pérdidas para los clubes formadores.
Más allá de los casos individuales, persiste la cuestión de cómo establecer un marco que asegure la compensación adecuada para la formación de jugadores que luego se consolidan en mercados internacionales.
El fútbol juvenil, con su gran movilidad, demanda reglas claras, transparencia en las transacciones y mecanismos que protejan el capital deportivo y pedagógico invertido por clubes como River Plate, que han contribuido históricamente al desarrollo de talentos que luego brillan en ligas de mayor exposición internacional.
