La selección argentina enfrentó a Angola en un amistoso celebrado en Luanda, con la presencia de Lionel Messi que aportó su talento y generateó una vibrante celebración popular, además de un considerable ingreso económico para la AFA. La aparición del capitán argentino, en un partido con detalles insólitos, fue clave para un triunfo de 2-0 en una travesía que combina motivos deportivos y comerciales.
Los más de 40.000 espectadores angoleños vibraron con un gol en contra que, para muchos, fue recibido como un festejo propio. La multitud coreaba entusiasta: “Messi, Messi, Messi”, en el Estadio 11 de Noviembre, que fue testigo de un momento único.
Este acto no fue solo deportivo, sino también un gran movimiento económico para la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). La razón del viaje a Angola, en la capital Luanda, fue en gran parte de índole económica: los informes locales indican que la selección argentina recibió aproximadamente 13 millones de euros por disputar el amistoso, dinero que se suma a la presencia estelar de Messi, que según las fuentes oficiales, aportó cerca de 8 millones de euros en concepto de caché.
Esta cifra, convertida a euros con un tipo de cambio aproximado de 1 euro = 0,87 euros, representa uno de los partidos más rentables en la historia de la selección albiceleste.
El motivo oficial del encuentro fue celebrar los 50 años de la independencia de Angola, una oportunidad que #Argentina aprovechó para fortalecer vínculos deportivos y económicos con el continente africano.
La participación de #Messi fue fundamental, ya que su presencia aseguró la única justificación lógica para la elevadísima remuneración. La logística del viaje fue compleja: el capitán argentino viajó desde Estados Unidos, donde actualmente reside, con escalas en Europa y desde Alicante, en España, hasta Luanda, en un desplazamiento que demandó varias horas y que implicó una inversión considerable por parte de la AFA.
A nivel deportivo, el partido en #Angola tuvo características particulares. Angola, con su selección que ocupa actualmente la posición 89 en el ranking FIFA, mostró un equipo muy atlético y agresivo, aunque con algunas inocencias defensivas que Argentina pudo aprovechar.
La selección argentina
La selección argentina, en proceso de preparación para el próximo Mundial, utilizó este encuentro para probar diferentes formaciones y jugadores, especialmente en la segunda mitad, cuando debutaron varios jóvenes talentos.
El estado del campo no favoreció una circulación fluida del balón, pero la Scaloneta supo adaptarse rápidamente, apostando a jugadas rápidas y a la capacidad de liderazgo de Messi.
En una de esas jugadas, Leo asistió a Lautaro Martínez, quien no desperdició la oportunidad y marcó el primer gol del partido. El arquero de Angola, Hugo Marques, de 39 años, se lució con varias atajadas, entre ellas una a Leo, que fue celebrada como una de las mejores acciones del partido.
El momento más destacado fue el gol de Messi, que ocurrió a poco del final del encuentro, una celebración que significó mucho para el público local, que terminó rindiéndose ante la magia del capitán argentino.
En los instantes finales se realizaron algunos cambios, con la aparición de nuevos talentos como Kevin Mac Allister y Gianluca Prestianni, quienes tuvieron oportunidad de mostrarse en un contexto diferente.
Este partido quedó marcado por su carácter singular: no solo por la importancia deportiva, sino por sus implicaciones económicas y políticas. La visita de la selección argentina a África refleja las nuevas tendencias del fútbol internacional, donde los amistosos con altos pagos y con presencia de figuras de elite, como Messi, sirven de puente para fortalecer relaciones y abrir nuevos mercados.
