Tras consagrarse campeón, Platense inicia conversaciones para mantener a sus principales futbolistas, enfrentando ofertas de otros clubes y buscando equilibrar su presupuesto para el futuro. La gestión del presidente Sebastián Ordoñez prioriza la estabilidad del plantel y la sostenibilidad económica del club.

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Aunque la temporada de fútbol en Argentina todavía no llega a su punto culminante para la Copa Libertadores, y con el Torneo Clausura aún por definir, en #Platense la atención se centra en la fase post-campeonato.

El presidente del club, Sebastián Ordoñez, anunció que a partir del martes retomarán las negociaciones para definir la situación de sus jugadores, ahora que el equipo obtuvo un título que les permite reforzar su posición y valor en el mercado.

Ordoñez explicó que, antes de la final en Santiago del Estero, había iniciado conversaciones de venta y que ya conocía del interés de otros conjuntos en algunos de los futbolistas del Calamar.

Sin embargo, decidió detener esas gestiones para no distraer al equipo en un momento decisivo. Con la obtención del campeonato, el club ajustará sus estrategias, ya que los valores de sus jugadores han aumentado y, por ende, las exigencias salariales también.

La gestión busca mantener el equilibrio en el presupuesto, evitar salidas forzadas por ofertas demasiado elevadas y seguir construyendo un proyecto de crecimiento sustentable.

Entre los jugadores que generan mayor interés destacan Ignacio Vázquez, capitán del equipo, quien ha expresado su deseo de jugar en Racing de Avellaneda, un club que siempre ha sido su sueño futbolístico.

Vázquez, cuyo contrato con Platense finaliza en diciembre y cuyo valor en el mercado se estima en unos 1,2 millones de euros (aproximadamente 1,3 millones de dólares), ha señalado que en su familia son hinchas de Racing, lo que aumenta su motivación por dar ese paso.

Otro de los nombres que más llaman la atención es Ronaldo Martínez, el goleador del equipo que ya fue finalista en otras oportunidades y que, por contrato, tiene vinculación hasta 2026.

Su rendimiento ha incrementado su cotización y en el club reconocen que será muy difícil retenerlo si algún club importante decide hacer una oferta formal.

El arquero Juan Pablo Cozzani, por su parte, ha sido uno de los destacados en la temporada, con pocos goles en contra y con contrato hasta 2028. El club busca mantenerlo, aunque también evalúa la posibilidad de obtener ingresos por su venta, ya que su rendimiento ha despertado interés en otras instituciones.

La estrategia del club para el #mercado de pases ha sido clara: buscar jugadores en momentos de baja rendimiento o que hayan tenido picos altos para potenciar su valor, y así facilitar futuras transferencias.

Este método ha dado frutos, ya que varios de los futbolistas que llegaron a Platense recuperaron su nivel y lograron avanzar en sus carreras.

Desde la gestión, Ordoñez afirmó que entender que algunos jugadores dejarán el club es parte de la realidad, y que están preparados para afrontar esas salidas.

La intención es crear una estructura sólida que permita delegar funciones, y no depender únicamente del liderazgo de los dirigentes. En ese contexto, también están negociando patrocinadores y nuevos auspicios para fortalecer la economía del club.

En el pasado, Platense ha tenido un papel relevante en el fútbol argentino, destacándose por su capacidad de recuperación y crecimiento social y deportivo.

El club conoció momentos de gloria en la década del 70 y, en los últimos años, volvió a mostrar su estirpe con la conquista del campeonato actual.

Por lo pronto, tras el título, la directiva se prepara para afrontar un período de negociaciones donde la prioridad será mantener la base del equipo y potenciar su balanza financiera.

La historia de Platense confirma que no solo en las canchas, sino también en las áreas administrativas y económicas, están en un proceso de consolidación que busca asegurar el futuro del club en un contexto cada vez más competitivo y demandante.