El talentoso mediocampista argentino, Leandro Paredes, busca potenciar el rendimiento de Boca Juniors en medio de una racha negativa y una situación futbolística complicada. Su incorporación podría ser decisiva para revertir la poca eficacia del equipo y encauzar una mejor etapa en competiciones nacionales e internacionales.

su presencia en el campo resultó fundamental para entender por qué es considerado uno de los jugadores más talentosos del #fútbol argentino y con experiencia en el fútbol europeo
Aunque solo jugó 30 minutos en ese encuentro, su presencia en el campo resultó fundamental para entender por qué es considerado uno de los jugadores más talentosos del fútbol argentino y con experiencia en el fútbol europeo, donde ha demostrado su habilidad en clubes como París Saint-Germain y Zenit de San Petersburgo.
Paredes, que encara su regreso tras una recuperación física y futbolística, fue determinante en la cancha con su control, visión y precisión en los pases filtrados, ofrenciendo claridad en el juego y generando oportunidades para sus compañeros.
Su actuación evidenció que, en medio de un momento difícil para Boca, su liderazgo técnico puede ser un elemento catalizador para cambiar la dinámica del equipo, que atraviesa una de sus peores rachas en la historia reciente.
Boca Juniors acumula nueve gestiones sin victorias en los últimos tres meses, una racha que ha provocado un profundo malestar en su hinchada y en la dirigencia.
La institución, que cuenta con una rica historia de éxitos y ha sido un semillero de grandes futbolistas argentinos, encara ahora un período de incertidumbre, sin participar en la Copa Libertadores por segundo año consecutivo y sin haber obtenido títulos en el último tiempo.
La llegada de Miguel Russo como técnico, en su tercera etapa, no ha logrado revertir la situación. A pesar de las renovaciones en el plantel, el equipo sigue mostrándose insípido, predecible y con falta de intensidad. La próxima semana, jugará un partido decisivo en Santiago del Estero ante Atlético Tucumán en la Copa Argentina, una oportunidad clave para asegurar un boleto a la próxima edición de la Libertadores, que se presenta como uno de los últimos recursos para levantar el ánimo y el rendimiento del club.
Una de las preguntas que ahora surge es si Paredes, en el estado físico y futbolístico en que se encuentra, podrá ser el factor que impulse a Boca a un cambio de dirección.
Su calidad de distribuidor y su capacidad de liderazgo en el campo, aunque no son suficientes por sí solos, pueden ser la chispa que encienda una reacción positiva en el equipo.
Es claro que Paredes no es un goleador ni un futbolista que desequilibre por sí mismo en forma individual, pero su funcionamiento puede ordenar y potenciar las virtudes del equipo.
La presencia de jugadores como Edinson Cavani, que se encuentra en el tramo final de su carrera, y otros que atravesaron bajos niveles de rendimiento, como Palacios, Braida, Alarcón y Velasco, hacen aún más necesario que Paredes reciba apoyos en el campo para desplegar toda su calidad.
Por eso, el rol del entrenador es fundamental. La gestión de Russo debe incluir decisiones como la recuperación de futbolistas como Kevin Zenón, que puede aportar desequilibrio y creatividad, así como buscar que Merentiel, que necesita compañeros que lo asistan en la ofensiva, reciba las condiciones adecuadas para rendir al máximo.
Además, se requiere que Paredes asuma un liderazgo psicológico y emocional en el vestuario. La clave será construir una estructura que exprese su sentido de pertenencia y humildad, pero también de carácter y autoridad. La historia de Boca, llena de triunfos, campeonatos y grandes jugadores que lucieron su camiseta con orgullo, debe servir de inspiración para que todos en el plantel, desde los mayores hasta los más jóvenes, remen en la misma dirección.
¿Podrá solo Paredes salvar la situación? La respuesta es clara: necesita aliados, compañeros que sepan interpretar su juego y que contribuyan a fortalecer esa estructura de liderazgo y rendimiento.