Agustín Lozano, líder de la Federación Peruana de Fútbol, es arrestado en medio de un amplio operativo por presuntos vínculos con una organización criminal.
El presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano, fue arrestado este jueves en un amplio operativo policial en su residencia ubicada en el sector de San Borja, Lima.
Esta detención se produce en el marco de una investigación que lo vincula con la organización criminal conocida como “Los Galácticos”. Durante su detención, Lozano se mostró compungido y pidió calma a su familia, expresando su deseo de que se haga justicia y que se aclare su situación ante la opinión pública.
Agustín Lozano asumió la presidencia de la FPF en diciembre de 2018, en un contexto complicado; su antecesor, Edwin Oviedo, había sido arrestado por sus conexiones con la delincuencia organizada y la corrupción.
Desde su llegada al cargo, Lozano ha estado en el centro de diversas polémicas, pero este último desarrollo trae consigo acusaciones graves que van más allá de las críticas previas.
Lo que se le imputa incluye no solo liderar una organización delictiva, sino también haber estado involucrado en fraudes administrativos, lavado de activos y corrupción a gran escala.
Las investigaciones en su contra son serias.
Según informes de la Fiscalía, Lozano presuntamente utilizó recursos de la federación para asegurarse votos que le garantizaran continuar al mando del fútbol peruano.
Además, se le acusa de favorecer a ciertos clubes locales mediante maniobras que beneficiaron su situación personal.
La venta de entradas y la reventa de boletos para el Mundial de Qatar 2022 también están bajo la lupa, lo que añade un nivel adicional de gravedad a las acusaciones.
Jorge Chávez Cotrina, fiscal coordinador de las Fiscalías Especializadas contra la Criminalidad Organizada, mencionó que Lozano podría enfrentarse a una pena de hasta 20 años de cárcel si se comprueban los delitos de los que es acusado.
La investigación que culminó en su detención se ha desarrollado a lo largo de un año y medio, con pruebas que, según la Fiscalía, son sólidas y circunstanciales.
Las detenciones abarcaron a un grupo considerable de funcionarios y directivos del fútbol peruano.
Entre los arrestados se incluyen a Karen Mandriotti, presidenta del club Academia Cantolao; Sabrina Martin Zamalloa, secretaria de la FPF; y varios otros presidentes de clubes, lo que indica que las ramificaciones de esta investigación podrían ser mucho más amplias de lo inicialmente considerado.
Lozano y los otros detenidos se encuentran en un periodo de detención preliminar de 15 días.
Durante este tiempo, se llevarán a cabo más investigaciones para determinar si existe suficiente causa para solicitar prisión preventiva.
Esta es una situación delicada para el fútbol peruano, que ha enfrentado repetidos escándalos de corrupción en el pasado, incluyendo el caso del ex presidente de la FPF y otros escándalos que han sacudido el deporte en el país.
Con esta nueva crisis, la imagen del fútbol peruano se ve nuevamente comprometida, lo que podría afectar la confianza de los aficionados y la percepción internacional sobre la organización del deporte en el país.