El piloto argentino Franco Colapinto atraviesa momentos complicados en Alpine, con un coche que no rinde y un escenario de carreras adverso, en medio de expectativas por su renovación para 2026.
Sin embargo, para el piloto argentino Franco Colapinto, los últimos eventos en #Alpine han sido un verdadero desafío, marcado por un rendimiento que no alcanza las expectativas y un futuro aún incierto.
Durante el Gran Premio de México en el circuito Hermanos Rodríguez, los problemas mecánicos evidenciaron las dificultades que atraviesan tanto el coche número 43, conducido por Colapinto, como el coche 10 de Pierre Gasly.
Ambos monoplazas mostraron un rendimiento limitado, arrastrándose sobre la pista y sin poder competir al nivel de otros rivales en la parrilla. La situación generó dudas sobre la continuidad de Colapinto en Alpine para la próxima temporada y despertó el interés del público y los expertos en saber si la escudería francesa dará un sí a la renovación del prometedor piloto argentino para 2026.
El rendimiento de Alpine durante esta parte del campeonato ha sido motivo de preocupación para los responsables técnicos y la dirección del equipo.
Los autos no logran avances significativos y el esfuerzo de los pilotos por sacar lo mejor de cada carrera no ha sido suficiente para remontar en la clasificación.
Según declaraciones del mismo Gasly, el equipo tuvo que revisar sus estrategias en plena carrera, optando por cambios que no dieron los resultados esperados.
Además, la presencia de obstáculos externos, como intervenciones de la FIA y banderas azules que impidieron a Colapinto intentar avanzar en las vueltas finales, complicaron aún más la situación.
A pesar de los obstáculos, Colapinto mostró determinación y mantuvo la esperanza de que las cosas puedan mejorar. En sus declaraciones posteriores, admitió que, aunque la situación es difícil, están en proceso de analizar todo para aprender y fortalecer su rendimiento en futuras competencias.
“No hay mucho que rescatar del resultado, pero confiamos en que extraeremos enseñanzas de esta experiencia”, afirmó el piloto argentino.
El jefe de equipo de Alpine
Por su parte, el jefe de equipo de Alpine, Steve Nielsen, destacó el esfuerzo de ambos pilotos en un fin de semana adverso. Reconoció que el coche no era competitivo y que la estrategia de cambio de neumáticos, que implicó apostar por compuestos blandos antes de tiempo, fue un riesgo que, en su mayoría, no resultó favorable.
Sin embargo, también resaltó el trabajo del equipo técnico y la cohesión que han mostrado durante todo el año en medio de los obstáculos.
La carrera en México se vio marcada por la intervención de la FIA en las últimas vueltas, con banderas azules y un auto de seguridad virtual que impidieron a Colapinto intentar adelantar a Gasly.
La pregunta que surge es qué podría haber pasado si esas intervenciones no hubieran ocurrido, si el joven piloto argentino habría logrado sobrepasar a su compañero o al menos luchar por posiciones más altas.
La respuesta, en el fondo, refleja también la incertidumbre que rodea a Alpine en estos momentos.
A pesar de los resultados, el futuro de Colapinto en Alpine aún tiene perspectivas positivas. Se espera que en el Gran Premio de Brasil, que tendrá lugar del 7 al 9 de noviembre, el equipo tenga una oportunidad de redimirse y que el joven argentino pueda demostrar su valía en un monoplaza que, se espera, sea más competitivo para la temporada 2026.
La expectativa de una renovación con Alpine crece, alimentada por el talento y la determinación del piloto, en un campeonato que sigue siendo uno de los más seguidos en la historia del automovilismo.
Mientras tanto, los aficionados continúan atentos a los próximos eventos, con la esperanza de que Colapinto pudiera dar la sorpresa en San Pablo y consolidarse como una de las figuras emergentes en la máxima categoría del automovilismo mundial.
