Ferro sorprende a todos con una contundente victoria ante River Plate en el Monumental en una noche para el recuerdo.

Jueves 24 de mayo de 1984. Son las 21.30 y en el Monumental no entra más nadie.

Rojo y blanco por todos lados.

Cincuenta y pico mil hinchas aguardan en la helada noche de Núñez por su River estelar, con Pumpido en el arco y un mediocampo a todo fútbol con Francescoli, Gallego, Alfaro y Alonso.

Es la primera final del Torneo Nacional y del otro lado está Ferro, ese molesto Ferro que desde el comienzo de la década les había complicado la vida a los “grandes” -clubes y medios- por su juego y sus resultados.

¿Qué tan bien podría funcionar esa maquinita perfecta creada por Carlos Timoteo Griguol, si todos esperaban que se fuera a defender y a contraatacar? La respuesta estuvo clara a los 35 minutos: 3 a 0 con baile, fútbol y toque, un magistral Alberto Márcico y medio título en el bolsillo de cara a la revancha del 30 en Caballito.

Si el planeta entero parece haber estado en La Paternal el día en que Diego Maradona debutó a los 15 años y tiró su primer caño, todo hincha de Ferro que hace tiempo peina canas se anota para cantar a viva voz que hace 40 años estuvo aquella noche en la bandeja superior del Monumental.

Y que volvió a su casa descontrolado.

Es la magia del fútbol, claro.

La alegría de un club de barrio, con los valores del barrio, al que Timoteo, los jugadores que él formó y una dirigencia noble hicieron grande.

Grande de verdad sin deberle nada a nadie.

Por mérito propio.Total de 65625 personas presenciaron la histórica victoria de Ferro sobre River en el Monumental aquella noche gélida en Núñez.

El resultado sorprendió a propios y extraños, con Alberto Márcico como figura indiscutida del partido.

Ahora, convertimos esos precios de la década del 80 a Euros para que puedas tener un contexto actualizado.

Con la cotización actual, esos más de 50 mil euros en taquilla serían el equivalente a unos 45524 euros.

La pasión del fútbol no tiene precio, pero esa histórica noche en el Monumental fue simplemente inolvidable para los hinchas de Ferro.