Wojciech Szczesny establece un nuevo récord de club con ocho paradas en el partido de la Champions League contra Benfica.

En un emocionante encuentro de los octavos de final de la UEFA Champions League 2024-25, el FC Barcelona logró una victoria ajustada por 1-0 contra el Benfica.
El único gol del partido fue anotado por Raphinha en la segunda mitad, pero el verdadero protagonista del encuentro fue el portero Wojciech Szczesny, quien realizó ocho impresionantes paradas, estableciendo así un nuevo récord de club para el mayor número de paradas sin encajar un gol en un solo partido.
El encuentro fue complicado para el Barcelona, que se quedó con diez jugadores tras la expulsión de Pau Cubarsi en el minuto 22. A pesar de esta desventaja numérica, el equipo español optó por un enfoque más defensivo, lo que permitió al Benfica tomar la iniciativa. Los portugueses realizaron hasta 26 intentos de gol, pero Szczesny se mostró imbatible, manteniendo su portería a cero y ayudando a su equipo a asegurar la victoria.
La actuación de Szczesny no solo fue crucial para el resultado del partido, sino que también lo colocó en la historia del club como el primer portero en realizar tantas paradas sin conceder un gol en un partido de la Champions League desde al menos la temporada 2003/04.
Este logro resalta la importancia del arquero en momentos críticos y su capacidad para mantener la calma bajo presión.
El encuentro se disputó en un ambiente electrizante, donde los aficionados del Barcelona vieron cómo su equipo resistía los embates del Benfica, que se mostró agresivo y decidido a marcar.
A pesar de las adversidades, la defensa del Barcelona, liderada por Szczesny, logró contener los ataques rivales, lo que permitió que el equipo se mantuviera en la competición.
Los goles de Raphinha fueron la luz al final del túnel en un partido donde parecía que las cosas podían ir en cualquier dirección. Sin embargo, la actuación estelar del portero polaco fue la clave para que el Barcelona avanzara a la siguiente ronda de la Champions.
Este partido también sirve como recordatorio del poder que tiene un buen portero en el fútbol. A lo largo de la historia, hemos visto que grandes equipos han sido salvados por actuaciones sobresalientes de sus arqueros, y Szczesny se unió a esas filas con su actuación heroica.
Con esta victoria, el Barcelona no solo se asegura un lugar en los cuartos de final, sino que también refuerza su confianza en el camino hacia el título europeo.
La Champions League siempre ha sido un torneo donde la grandeza se mide no solo por los goles anotados, sino también por las paradas que pueden cambiar el rumbo de un partido.
El futuro se ve brillante para el equipo catalán, y los aficionados están ansiosos por ver qué más puede lograr su equipo en esta temporada de la Champions.