Un enfrentamiento entre Crystal Palace y Millwall se ve empañado por una acción violenta que resultó en la expulsión de Liam Roberts.
En un partido donde la violencia se apoderó del ambiente, el enfrentamiento entre Crystal Palace y Millwall, correspondiente a los octavos de final de la FA Cup, dejó una imagen que difícilmente se borrará de la memoria de los aficionados.
Este sábado, el arquero visitante, Liam Roberts, fue el protagonista de una acción que derivó en su expulsión directa tras una jugada violenta en la que impactó con sus tapones en la cara del delantero Jean-Philippe Mateta.
Todo sucedió a los 8 minutos del primer tiempo en el Selhurst Park, la casa del Crystal Palace, cuando un pelotazo dirigió el balón hacia el área defendida por Roberts.
Mateta, en su carrera, parecía ganar la velocidad sobre el defensor Jake Cooper, lo que llevó a Roberts a tomar una decisión apresurada y arriesgada.
En su intento por despejar el balón, el arquero levantó la pierna de manera temeraria y conectó una patada directamente en la cara del jugador rival, que cayó inmediatamente al suelo, incapacitado.
La jugada fue lo suficientemente clara como para que el árbitro Michael Oliver considerara la necesidad de recurrir al VAR. Tras revisar las imágenes, dictó una tarjeta roja directa para Roberts, calificando la acción como juego violento. Mateta fue trasladado en camilla y no pudo continuar en el partido, siendo reemplazado por Eddie Nketiah.
La situación dejó al Crystal Palace con un jugador más en el campo, lo que pronto se tradujo en el marcador. El equipo local se adelantó 2-0 gracias a un gol en propia puerta de Japhet Tanganga y otro del colombiano Daniel Muñoz. Sin embargo, antes de finalizar la primera mitad, el visitante Wesley Harding logró descontar, dejando el marcador 2-1.
En la segunda mitad, Nketiah, quien había entrado para sustituir a Mateta, selló el resultado con un gol de cabeza que estableció el 3-1 definitivo, asegurando así la clasificación de Crystal Palace a la siguiente ronda de la FA Cup.
Este evento violento no es inusual en el contexto del fútbol británico, donde la rivalidad entre los equipos puede llevar a situaciones extremas. La FA Cup ha sido testigo de varias controversias a lo largo de su historia, pero pocos incidentes como este han suscitado tanto debate sobre la seguridad de los jugadores en el campo.
Con este triunfo, el Crystal Palace avanza en un torneo que es uno de los más tradicionales del fútbol inglés, pero la imagen de la falta de Roberts quedará grabada como un recordatorio de que al final, la pasión por el juego puede llevar, en ocasiones, a momentos trágicos.
