La selección de Sudáfrica logra su primera corona en la historia del cricket internacional al derrotar a Australia en la final del ICC World Test Championship en Lord's, marcando un hito para la nación. Con actuaciones destacadas de sus estrellas, los Proteas dejan huella en el ciclo de dos años que culminó en esta histórica victoria.
Este logro representa un hito para la nación africana, que ha tenido una trayectoria en ascenso en el cricket mundial, y cierra un ciclo de dos años marcado por actuaciones memorables de sus jugadores.
Desde tiempos recientes, #Sudáfrica ha trabajado arduamente para recuperar su lugar en la élite del cricket mundial. La victoria en el #WTC no solo simboliza el éxito deportivo, sino también el esfuerzo colectivo y la evolución de un equipo que ha sabido combinar experiencia y juventud.
La final en #Lord's fue la culminación de un proceso que empezó a gestarse en el año 2023, cuando la selección sudafricana empezó a consolidar su estilo de juego y a mostrar una mentalidad ganadora.
Entre los protagonistas destacados, Temba Bavuma se destacó como capitán y líder en la cancha. Con una actuación sobresaliente, Bavuma acumuló 711 carreras en 13 innings durante el ciclo, con un promedio de 59.25, logrando dos centuries y cinco half-centuries. Su mejor puntuación fue 113, pero sin duda, su contribución más memorable fue la carrera de 66 en la final, que fue crucial para asegurar la victoria.
En comparación, otros bateadores como David Bedingham mostraron estabilidad, anotando 711 carreras en 23 innings, con un promedio de 35.55, destacando en momentos clave, especialmente con un 110 contra Nueva Zelanda, en una serie donde Sudáfrica envió una alineación alterna debido a compromisos en la liga local.
Aiden Markram, el elegante bateador de la selección, inició el ciclo con una actuación brillante, anotando 106 carreras en un partido difícil contra India en Ciudad del Cabo, estableciendo así su presencia en el equipo.
A lo largo del ciclo, acumuló 708 carreras en 20 innings, con un promedio de 37.26. Su momento culminante fue durante la final en Lord's, donde logró una century que quedó grabada en la historia del cricket sudafricano, siendo el primer jugador del país en lograr un siglo en una final de torneo de ICC.
En el ámbito de los bolos, Kagiso Rabada fue sin duda uno de los grandes protagonistas. Tras cumplir una suspensión por uso de drogas recreativas, regresó con más fuerza y realizó una actuación memorable en la final, logrando 9 wickets en el partido y un total de 64 en el ciclo, siendo el octavo máximo wicket-taker a nivel mundial en este período.
Rabada mostró su carácter competitivo y su capacidad para rendir en momentos cruciales, logrando además cuatro cinco-wicket hauls en todo el ciclo.
Keshav Maharaj, el espigado spinner, estuvo cerca de alcanzar un récord histórico, quedándose a un wicket de los 200 en Test, pero igualmente dejó una huella significativa con 41 wickets en nueve partidos, con un mejor rendimiento de 5/59.
Su consistencia y capacidad para tomar wickets en momentos clave lo consolidan como uno de los mejores spinners de su generación.
Se perfila como un futuro gran estrella del cricket sudafricano
Por su parte, Marco Jansen, el joven lanzador, se perfila como un futuro gran estrella del cricket sudafricano. En el ciclo, tomó 32 wickets en siete partidos, con unas cifras destacadas de 7/13 contra Sri Lanka. Además, aportó con el bate, sumando 200 carreras en 10 innings, con un promedio de 25.00 y dos medias centurias, siendo su mejor score 84 no fuera. Jansen ha demostrado ser un jugador completo, con un ritmo de juego que combina velocidad y precisión.
La victoria de Sudáfrica en Lord's ha sido celebrada a nivel mundial, y el presidente de la ICC, Jay Shah, felicitó al equipo por su logro histórico.
Este triunfo no solo marca un antes y un después en la historia del cricket sudafricano, sino que también inspira a futuras generaciones a seguir soñando con la gloria en los campos internacionales.
En cifras, la victoria también tuvo un impacto económico, con premios que se estiman en aproximadamente 4.5 millones de euros, distribuidos entre los integrantes del equipo y la federación. Este tipo de premios y reconocimientos promueven el desarrollo del deporte y motivan a los jóvenes a involucrarse en el cricket, que en Sudáfrica sigue creciendo en popularidad y nivel competitivo.
