La serie de cinco partidos en Inglaterra pondrá a prueba la filosofía de cricket agresivo y de resultados rápidos que ha adoptado Inglaterra bajo Stokes y McCullum, enfrentándose a una India que busca mantener su dominio en un escenario donde Jasprit Bumrah podría ser clave.

Este enfrentamiento no solo definirá el rumbo de ambas selecciones, sino que también pondrá a prueba la innovadora filosofía de juego conocida como 'Bazball' que #Inglaterra ha implementado desde 2022 bajo la dirección del capitán #Ben Stokes y el entrenador Brendon McCullum.
Desde la histórica victoria en 2022 en Edgbaston, donde los ingleses lograron retener el trofeo tras un empate 2-2 contra India, la forma de jugar de Inglaterra ha cambiado radicalmente.
La victoria en ese partido marcó un antes y un después, demostrando que un enfoque audaz y ofensivo puede ser altamente efectivo en las pruebas de cricket de larga duración.
Además, en 2023, Inglaterra logró un empate en la serie contra Australia en la Ashes, reafirmando que su estilo de juego puede ser tanto agresivo como resultadista.
El éxito de esta estrategia se refleja en las estadísticas recientes. Bajo el mando de Stokes y McCullum, Inglaterra ha ganado 15 de sus últimos 20 Tests en casa, con una tasa de victorias del 75%. Solo han perdido cuatro encuentros y han logrado un empate, lo que los posiciona como una de las selecciones más dominantes a nivel mundial en esta modalidad.
Solo Sudáfrica supera estos números, con un 87.5% de victorias en sus Test en casa desde junio de 2022, momento en que Inglaterra comenzó su nueva era.
En el aspecto técnico, el promedio de bateo de los siete mejores jugadores ingleses en casa es de 43.86, el segundo mejor del mundo, solo por detrás de Sri Lanka. Además, su tasa de strike rate, que refleja la rapidez con la que anotan carreras, es de 73.90, muy por encima del resto de las naciones, destacando especialmente en comparación con India, que tiene una tasa de 60.88.
El estilo de 'Bazball' ha transformado no solo la estrategia, sino también la mentalidad de los jugadores. Desde abrebocas hasta los últimos en el orden, los jugadores ingleses no temen lanzar golpes decisivos, incluyendo golpes de seis de manera natural y con confianza.
Figuras clave como Joe Root, con 1,783 carreras en 20 Tests, y Ollie Pope, con 1,352 en 17 Tests, han demostrado ser pilares en el line-up con promedios de más de 48 y 76 en strike rate, respectivamente.
Otros jugadores como Zak Crawley, con 1,045 carreras y un promedio de 38.70, y Ben Duckett, que acumula 1,007 en 13 Tests, también han mostrado consistencia y rapidez en su juego.
Ben Stokes
Ben Stokes, además, ha aportado con 974 carreras en 17 Tests, mostrando que sus habilidades como bateador se complementan con su liderazgo en el campo.
La forma en que estos jugadores se adaptan y ejecutan la estrategia ofensiva ha sido clave para la reciente racha de Inglaterra en tierra propia.
Por otro lado, #India llega a esta serie con una de las plantillas más fuertes y con #Jasprit Bumrah en su mejor momento. La pregunta que muchos se hacen es si Bumrah, considerado uno de los mejores lanzadores del mundo actualmente, podrá mantener su rendimiento estelar y frenar la ofensiva inglesa.
La historia reciente indica que India busca mantener su dominio en los Tests fuera de casa, pero enfrentarse a un equipo que ha cambiado su estilo de juego podría ser un desafío aún mayor.
Históricamente, India ha tenido grandes momentos en Inglaterra, incluyendo su primera victoria en una serie de Test en 2007 y la serie lograda en 2018, donde mostraron una sólida resistencia y estrategia inteligente.
Sin embargo, la dinámica actual del cricket mundial favorece a los equipos que adoptan estilos agresivos y de resultados rápidos, como el que propone Inglaterra.
En definitiva, esta serie será una prueba definitiva para la filosofía de 'Bazball' y para las aspiraciones de India de seguir dominando en todos los formatos.