Por primera vez desde 2015, la selección india permitió más de 500 carreras en una prueba fuera de su país, en un partido marcado por récords y lesiones en Manchester.
Este hecho histórico no se registraba desde 2015, cuando Australia anotó 572 carreras en Sydney, marcando un momento clave en la historia de los enfrentamientos internacionales.
Durante el cuarto Test de la serie, Inglaterra, tras ganar el sorteo, optó por lanzar primero y logró reducir a #India a 358 carreras en su primera entrada.
Sin embargo, en la segunda, los locales demostraron una ofensiva imparable, alcanzando 544/7 en el cierre del tercer día. Los bateadores de #Inglaterra destacaron con actuaciones memorables: Zak Crawley, Ben Duckett, Ollie Pope y Ben Stokes sumaron brillantes medias de medio siglo, mientras que Joe Root logró una histórica centena, superando a Ricky Ponting como el segundo máximo anotador en la historia de los Tests.
Este récord de 544 carreras marca un punto de inflexión en las series recientes, pues desde 2015 solo Inglaterra había alcanzado o superado los 500 en contra de India en partidos de prueba, incluyendo 537 en Rajkot en 2016, 578 en Chennai en 2021 y ahora esta cifra en Manchester.
En el desenvolvimiento del partido, Inglaterra comenzó su día con 225/2, con Ollie Pope (20*) y Joe Root (11*) sin perder. Ambos construyeron una sólida asociación de un siglo, apoyados en las destacadas actuaciones de Ben Duckett, quien anotó 94 en 100 bolas con 13 límites, y Zak Crawley, con 84 en 113 bolas también con 13 límites y un seis.
Al cierre de la primera sesión, Inglaterra culminó con 332/2, ambos con medio siglo en su haber.
El tercer día fue testigo de un giro en el partido. Jasprit Bumrah logró una hazaña histórica al convertirse en el primer lanzador asiático en obtener más de 50 wickets en Tests en Inglaterra y Australia, un récord que presuntamente refleja su consistencia y calidad en el escenario internacional.
India intentó resistir
Durante la segunda sesión, India intentó resistir, pero sufrió pérdidas clave. Washington Sundar eliminó a Ollie Pope (71 en 128 bolas) y Harry Brook, pero el capitán Ben Stokes y Root lograron mantener la resistencia con una centena y una notable actuación de 150 carreras, respectivamente.
Root, con su 38ª centena, superó a Ricky Ponting y se consolidó como uno de los mejores bateadores en la historia del cricket.
Los problemas físicos también afectaron a los jugadores indios. Jasprit Bumrah y Mohammad Siraj tuvieron que abandonar el campo en varias ocasiones, evidenciando el desgaste físico en un partido tan exigente. Stokes, por su parte, alcanzó su medio siglo pero tuvo que abandonar brevemente el campo por molestias en la pierna izquierda.
En la cuarta sesión, los lanzadores indios lograron reducir a Inglaterra a 528/7, eliminando a Jamie Smith y Chris Woakes en rápidos ataques. Sin embargo, Stokes regresó a batir y, junto a Liam Dawson (21*), mantuvieron a Inglaterra con una resistencia sólida, cerrando el día con 544/7 y una ventaja de 186 carreras.
La estrategia inicial de Inglaterra fue optar por lanzar primero tras ganar el sorteo, confiando en su ofensiva, mientras que India mostró avances en sus principales bateadores, como Sai Sudharsan (61), Yashasvi Jaiswal (58) y Rishabh Pant (54), quienes aportaron significativamente a la primera entrada india.
La actuación de Stokes, con 5/72, fue clave para frenar el avance indio, aunque la resistencia de los bateadores ingleses mantuvo el partido abierto y lleno de expectativas para los próximos días.
Este partido evidencia no solo la fortaleza y resiliencia de Inglaterra, sino también los desafíos que enfrenta el equipo de India en sus recientes presentaciones internacionales.
