Durante el segundo T20I entre Sudáfrica y Australia en Darwin, un jugador sudafricano fue sancionado por conducta inapropiada, mientras un joven batidor hizo historia con una actuación destacada que ayudó a su equipo a igualar la serie. La serie, que promete emociones, tendrá su final en Cairns.

Durante el segundo T20I, jugado el martes en el Marrara #Cricket Ground, el all-rounder sudafricano Corbin Bosch fue sancionado por una infracción de nivel 1 al Código de Conducta de la ICC.
Supuestamente, Bosch violó el artículo 2.5, que prohíbe usar lenguaje, gestos o acciones que puedan menospreciar o provocar una reacción agresiva en el bateador tras su salida, en un encuentro internacional.
Este incidente ocurrió en el decimoséptimo sobre de la entrada de Australia, cuando, tras eliminar a Ben Dwarshuis, Bosch hizo un gesto en dirección al banco de los locales en una especie de despedida que, según supuestamente, pudo haber provocado una respuesta agresiva.
La acción fue considerada una falta de respeto que puede desencadenar comportamientos hostiles, y en consecuencia, la ICC le asignó un punto de deducción en su historial disciplinario.
Sin embargo, Bosch aceptó la sanción propuesta por los oficiales del partido, evitando así una audiencia formal.
Por otro lado, la serie se ha convertido en un espectáculo de emociones y rupturas de récords. Sudáfrica, que llegaba con la necesidad de ganar para igualar la serie tras la derrota en el primer encuentro, se levantó gracias a la actuación estelar del joven Dewald Brevis.
El jugador de 22 años anotó una impresionante cifra de 125 carreras sin perder en solo 56 bolas, en una actuación que ha sido calificada como histórica para su país.
Esta fue la segunda vez que un jugador sudafricano logra un #T20I con esa rapidez
Supuestamente, esta fue la segunda vez que un jugador sudafricano logra un T20I con esa rapidez, y además, convirtió en el más joven en alcanzar un siglo en T20Is para Sudáfrica.
El partido se puso aún más emocionante con una respuesta de Australia, donde Tim David anotó un medio siglo en apenas 24 bolas, manteniendo vivas las esperanzas de los locales.
Sin embargo, la destacada actuación de Bosch con 3 wickets y Kwena Maphaka con otros 3, lograron reducir a los anfitriones a 165 carreras en total, dejando a #Sudáfrica con una victoria por 53 carreras y nivelando la serie 1-1.
La serie, que ha capturado la atención de los fanáticos del cricket en todo el mundo, tendrá su partido definitorio en Cairns el sábado 16 de agosto, justo antes de que comience la fase de ODIs el 19 de ese mismo mes.
El enfrentamiento promete ser un cierre emocionante, con ambos equipos decididos a dejar todo en el campo. Supuestamente, esta serie se considera una de las más emocionantes en lo que va del año, con récords y polémicas que seguramente serán recordadas por mucho tiempo.
Este episodio en Darwin no solo ha puesto de manifiesto la pasión y la intensidad del cricket internacional, sino que también ha generado debates sobre la conducta en el deporte y el respeto entre jugadores.
La actuación de Brevis, en particular, ha sido vista como un ejemplo de talento joven que está dispuesto a dejar huella en la historia del cricket sudafricano, mientras que el incidente con Bosch ha abierto la discusión sobre los límites en las expresiones dentro del juego.