San Lorenzo presentó una gran actuación en Brasil pero no logró avanzar en la Copa Libertadores al perder 1-0 ante Atlético Mineiro. A pesar de los esfuerzos, el equipo argentino se despidió del torneo en una noche llena de tensión.
San Lorenzo se despidió de la Copa Libertadores en un emocionante encuentro contra Atlético Mineiro en el Arena MRV de Brasil.
A pesar de haber realizado un gran esfuerzo y haber dominado gran parte del partido, los hombres de Gabriel Milito no lograron concretar sus oportunidades y finalizó el partido con una derrota por 1-0. Este resultado, sumado al empate 1-1 en el partido de ida, significa que el Ciclón queda eliminado del torneo continental, a pesar de que sus jugadores dejaron todo en el campo.
El equipo argentino mostró gran disciplina y concentración, algo que destacó en la estrategia que planteó el entrenador.
A lo largo del primer tiempo, San Lorenzo supo controlar los espacios y ejercer presión sobre los jugadores de Mineiro, quienes no lograron hilar sus jugadas con claridad.
Jhohan Romaña tuvo una destacada actuación, neutralizando a Deyverson, mientras que Iván Leguizamón se convirtió en una constante amenaza sobre la banda izquierda del ataque, pero el destino no les sonrió en el momento crucial.
A lo largo del primer tiempo, San Lorenzo tuvo varias ocasiones claras de gol.
Leguizamón incluso envió un potente disparo que se estrelló en el travesaño, demostrando que el equipo merecía más de lo que estaban logrando en ese momento.
Mientras tanto, en el banquillo, el técnico Romagnoli lamentaba la falta de 'suerte' que parecía acompañar al equipo en momentos definitorios.
"No estamos teniendo la fortuna que necesitamos en este tipo de partidos", comentó tras el encuentro.
El segundo tiempo comenzó con un giro inesperado.
A solo minutos de iniciar, San Lorenzo perdió la oportunidad de abrir el marcador cuando Nicolás Tripichio dejó escapar una clara chance de gol.
En la siguiente jugada, Atlético Mineiro aprovechó un tiro de esquina y Rodrigo Battaglia anotó el único gol del partido, un duro golpe para el conjunto argentino.
Aunque San Lorenzo intensificó su búsqueda del gol, las ocasiones seguían sin concretarse.
La presión y el nerviosismo comenzaron a trasladarse a los jugadores brasileños, pero se notaba la falta de puntería en los hombres del Ciclón.
Finalmente, a pesar de que el equipo argentino hizo más que su rival, el marcador no se movió y terminó con una dolorosa eliminación.
La historia de San Lorenzo en la Copa Libertadores ha estado marcada por altibajos, con éxitos notables, como la consagración en 2014, pero también con decepciones, como la de este año.
Ahora, después de esta eliminación, se enfocarán en rescatar la temporada en el ámbito local, aplicando las lecciones aprendidas en el torneo internacional.
La afición espera que el equipo logre revertir esta situación y vuelva más fuerte para futuras competencias.
Este partido, que estuvo rodeado de incidentes entre la policía y los aficionados argentinos, dejó una sensación de frustración y tristeza en los hinchas, quienes soñaban con un camino más largo en este prestigioso torneo.
A pesar de todo, la hinchada de San Lorenzo sigue firme, apoyando a su equipo en los desafíos que se avecinan.