River Plate se encuentra ante la difícil tarea de desafiar la supremacía brasileña en la Copa Libertadores, un torneo en el que los clubes de Brasil han dominado en los últimos años, alzándose con los títulos en las últimas cinco ediciones.

Este año, la situación es nuevamente complicada, ya que en los cuartos de final, los equipos brasileños cuentan con cinco representantes, cada uno con situaciones muy diferentes.

El certamen cuenta con la participación del Millonario, Peñarol de Uruguay y Colo-Colo de Chile como los representantes argentinos y sudamericanos fuera de Brasil.

Históricamente, la supremacía de los equipos brasileños en este torneo no es algo reciente: en las últimas cuatro temporadas, en tres de ellas, cinco clubes de Brasil han llegado a esta instanci.

Particularmente, este año se marca un hito, ya que es la primera vez que tres equipos de una misma ciudad, Río de Janeiro, llegan a los cuartos de final: Flamengo, Fluminense y Botafogo son los conjuntos que buscan avanzar en la competición, dejando claro el dominio carioca.

Por otro lado, para los argentinos, este es solo el segundo año en la última década donde solo un club se clasifica a esta fase, siendo el anterior en 2021, cuando River fue eliminado por Atlético Mineiro.

Botafogo, que lidera el Brasileirao, presenta una situación curiosa, ya que, aunque muestra un gran rendimiento en su liga, genera dudas sobre su capacidad para trascender en la Copa Libertadores.

Aún vive en la memoria de sus hinchas la decepción del año anterior, cuando dominaron el Brasileirao durante 31 fechas, pero terminaron en un decepcionante quinto lugar.

La lesión de su máximo goleador, Júnior Santos, quien anotó nueve goles en la Libertadores, complica aún más la situación del Fogão.

Su ausencia por al menos dos meses debido a una fractura en la tibia izquierda deja un vacío importante en el equipo que enfrentará a San Pablo en cuartos de final, un equipo que ha mejorado bajo la dirección de Luis Zubeldía, tras superar a Nacional de Montevideo en octavos con un sólido 2-0 en la vuelta.

Por su parte, Atlético Mineiro, de Gabriel Milito, también llegó a esta instancia tras una buena fase de grupos y una eliminatoria complicada donde eliminaron a San Lorenzo.

Con figuras como Gustavo Scarpa y Hulk, se perfilan como serios competidores, aunque su rendimiento en el Brasileirao no ha sido el esperado.

El Fluminense, por otro lado, vive un momento crítico en el campeonato local, necesitando impulsar su rendimiento con el respaldo de su éxito en la Libertadores.

Eliminando a Gremio en octavos por penales, espera revertir la mala situación en la liga, donde actualmente está en riesgo de descenso.

Finalmente, Flamengo se aferra a su rica historia, buscando su cuarto título en la Libertadores, y avanzando a esta fase después de derrotar a Bolívar.

A pesar de las complicaciones que han enfrentado, incluido el ingreso hospitalario de su entrenador Tite tras un partido en La Paz, el club se mantiene fuerte en la búsqueda de la gloria continental.

Ciertamente, la Copa Libertadores 2023 está llena de desafíos, con River Plate intentado hacer frente a un potente bloque brasileño, mientras que otros clubes de la región buscan desestabilizar la hegemonía que los brasileños han establecido en los últimos años.

La competencia se intensifica, y el camino hacia la final está lleno de obstáculos y sorpresas, donde se espera que la pasión y el talento de los jugadores jueguen un rol crucial en el destino de cada club.