Colegiales superó a Los Andes en una final repleta de emociones y polémicas, logrando su ascenso a la Liga Profesional tras 68 años de ausencia.
La reciente final del torneo de la Primera B, que enfrentó a los campeones del Apertura y Clausura, Los Andes y Colegiales, fue escenario de un desenlace memorable repleto de momentos cruciales y controversiales.
El equipo de Colegiales, conocido como el Tricolor, se impuso con un claro 2-0, asegurando su lugar en la Liga Profesional de Fútbol argentino para 2025.
Los goles que llevaron a la victoria a Colegiales fueron anotados por Laureano Marra y Mauricio Camargo, marcando un hito para el equipo que había estado ausente en la segunda división del fútbol argentino durante 68 años.
Este triunfo se convierte en un capítulo significativo para el club, ya que representa no sólo un ascenso, sino también la culminación de un esfuerzo colectivo que se ha desarrollado a lo largo de varias temporadas.
Sin embargo, la actuación de Los Andes se vio empañada por distracciones fuera del campo.
Lautaro Torres, uno de los jugadores más destacados del equipo, fue captado participando en la Copa Potrero, un torneo alternativo organizado por Sergio Agüero, un día antes de la crucial final.
Aunque el entrenador Leonardo Lemos decidió mantenerlo en la alineación como titular, esta situación evidenció una falta de concentración que pudo haber influido en el desempeño del equipo.
Desde el inicio del partido, Colegiales mostró un ímpetu característico, y fue en el minuto 26 cuando Marra, con un cabezazo certero, abrió el marcador, alterando la dinámica del juego y dejando a Los Andes en una situación de presión constante.
Tras este primer gol, la visita tuvo que reaccionar y buscar la manera de igualar el marcador, pero la tensión se convirtió en un peso psicológico que fue evidente a medida que avanzaba el encuentro.
En una jugada polémica durante el segundo tiempo, un altercado entre Manuel Brondo de Los Andes y Joaquín Cancio provocó el primer momento crítico del partido.
Brondo recibió una tarjeta amarilla por un codazo a Cancio, acción que, conforme a la opinión de muchos, debió resultar en una expulsión.
En medio del caos, Sebastián López, el capitán de Los Andes, trató de calmar la situación, pero el árbitro Edgardo Zamora lo expulsó por agredir a su compañero, generando confusión en el campo.
A pesar de la controversia, y tras revisar junto a su asistente la acción, Zamora decidió revertir la expulsión, lo que dejó a Los Andes con un aliento de esperanza.
Sin embargo, la falta de concentración y la presión del momento fueron demasiado grandes, y poco después, Marcelo Camargo amplió la ventaja para Colegiales con un tiro libre, dejando el encuentro prácticamente sentenciado.
Los Andes intentó luchar por la remontada, pero el tiempo se agotó y el partido finalizó con un contundente 2-0 a favor de Colegiales, quien celebró su ascenso ruidosamente en el Libertarios Unidos de Munro.
Este ascenso no solo es simbólico, sino que marca un nuevo comienzo para el club que regresa a la competencia profesional después de más de medio siglo.
La historia de Colegiales en el fútbol argentino ahora adquiere nuevas dimensiones, y los aficionados sueñan con un futuro brillante en la segunda división.