El club santiagueño se encuentra a un paso de ganar su primer título de AFA y obtener un lugar en la Copa Libertadores.

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Central Córdoba de Santiago del Estero está a un paso de lograr algo sin precedentes en su historia: ganar por primera vez un título oficial de la AFA y, de esa manera, clasificar a la prestigiosa Copa Libertadores.

Este club, fundado el 3 de junio de 1919, alcanzó una notable popularidad en la provincia durante la década de 1960, cuando conquistó diez campeonatos entre 1959 y 1967, aunque hasta entonces solo había cosechado un título en 1945.

En 1967, Central Córdoba se convirtió en el primer club santiagueño en competir en los viejos torneos nacionales, logrando un impactante triunfo sobre Boca Juniors en la Bombonera con un marcador de 2-1.

Sin embargo, su presencia en la Primera División fue fugaz, con solo dos participaciones: la mencionada en 1967 y otra en 1971. En ascenso, el club se mantuvo por seis temporadas en la categoría de ascenso, hasta que en 1992 regresó a su liga original.

Los años posteriores vieron al Ferroviario experimentar altibajos, incluyendo el descenso a la Liga Santiagueña en 2000. Sin embargo, el club renació en 2004 al volver al Argentino B y, en 2007, llegó al Federal A. La última década ha sido crucial para su historia, ya que en 2014 volvió a la B Nacional y, a pesar de un descenso en 2017, su ascenso a la Primera División se consolidó en 2019.

Uno de los factores determinantes en este resurgimiento fue la influencia de Pablo Toviggino, quien se convirtió en tesorero de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) tras haber sido presidente del Consejo Federal desde la liga santiagueña.


A su vez, el apoyo del gobernador de la provincia, Gerardo Zamora, fue significativo en esta etapa: asumió el 10 de diciembre de 2017 y propuso la construcción del estadio Madre de Ciudades, el cual, aunque finalizó en mayo de 2020, fue inaugurado el 4 de marzo de 2021.

Bajo la dirección de Omar De Felippe, Central Córdoba ha logrado encadenar una serie de buenos resultados que los tiene a las puertas de la gloria.

De Felippe regresó al equipo tras una corta etapa con otros entrenadores, y desde su llegada, el equipo logró 13 partidos sin perder, incluidos 8 triunfos y 5 empates.

Este camino hacia la Copa Argentina comenzó con Abel Balbo al mando, quien condujo al equipo a una victoria contundente por 3-1 contra Quilmes en los 32avos de final.

Posteriormente, Lucas González Vélez asumió el rol, pero su paso fue poco fructífero, ganando solo un partido en 9 encuentros. La vuelta de De Felippe coincidió con un notable cambio en la actitud y el rendimiento del equipo.

Ahora, Central Córdoba se prepara para un partido crucial que podría decidir su futuro en el fútbol argentino. Este miércoles, se encuentra a 90 minutos de realizar su gran sueño y asegurar un lugar en la Copa Libertadores, un logro que cambiaría la historia del club para siempre.