El Bayer Leverkusen dejó escapar una oportunidad de acercarse a la cima de la Bundesliga tras empatar 1-1 contra St. Pauli, en un encuentro marcado por la resistencia local y un gol decisivo en los últimos minutos.

El pasado domingo en el Millerntor, el Bayer Leverkusen vio cómo sus aspiraciones de acercarse a la cima de la Bundesliga se complicaban después de un empate 1-1 contra el modesto St.
Pauli. Este resultado no solo afectó las expectativas del equipo de Xabi Alonso, sino que también dejó a los visitantes con una oportunidad aún más difícil de alcanzar al líder, Bayern Múnich, en la recta final de la temporada.
El encuentro comenzó con un St. Pauli muy bien plantado en el campo, presionando alto y generando varias ocasiones peligrosas en los primeros minutos. La estrategia local parecía clara: aprovechar su condición de local y buscar sorprender al campeón en su propio terreno. Sin embargo, fue el Leverkusen quien abrió el marcador en el minuto 32 con un gol de Patrik Schick. El delantero checo se elevó por encima de todos para rematar con precisión un tiro libre ejecutado por Alejandro Grimaldo, poniendo a los visitantes en ventaja y dando un impulso anímico a su equipo.
A pesar del gol, el partido no se calmó y ambos equipos siguieron buscando la portería contraria. St. Pauli, con su carácter luchador, tuvo una buena oportunidad para igualar en el segundo tiempo, especialmente en el minuto 74 cuando Morgan Guilavogui logró anotar tras una jugada, pero el gol fue anulado por fuera de juego.
La tensión en el campo aumentaba y la afición local no dejaba de animar a su equipo, que buscaba con desesperación un empate que manteniera sus esperanzas de sumar puntos.
Finalmente, en los minutos finales, la perseverancia de St. Pauli dio frutos. En el minuto 78, tras un tiro libre ejecutado por Danel Sinani, el guardameta Lukas Hradecky no pudo controlar bien el balón y Carlo Boukhalfa aprovechó para empujar el balón a la red y decretar el 1-1 definitivo.
La igualdad reflejaba el esfuerzo de ambos equipos, aunque fue un golpe duro para las aspiraciones del Leverkusen, que ve cómo su lucha por alcanzar a Bayern se vuelve cada vez más difícil.
Boukhalfa fue reconocido como el 'Jugador del Partido' por su papel crucial en la resistencia del St. Pauli, además de anotar el gol del empate. El mediocampista no solo fue decisivo en el marcador, sino que también mostró un rendimiento constante en la recuperación y en la generación de juego, con un total de cuatro disparos y gran movilidad en el campo.
Este resultado complicó aún más la situación del Leverkusen, que ahora se encuentra a cuatro puntos del líder Bayern Múnich, que recientemente venció a FC Heidenheim y se acerca cada vez más a asegurar el título.
La próxima jornada será decisiva para los de Xabi Alonso, quienes deberán sumar los tres puntos en su visita a FC Augsburg si quieren mantener vivas sus esperanzas de campeonato.
Por su parte, Bayern Munich sigue en la cima con 72 puntos, y con solo cinco puntos necesarios para asegurarse la Liga, todo indica que el título podría decidirse en las próximas semanas.
La historia del fútbol alemán está llena de sorpresas y giros, y aunque el Leverkusen todavía tiene oportunidad de pelear, la realidad actual muestra que la lucha por la Bundesliga se acerca a su fin.
La temporada pasada, el Bayern conquistó su noveno título consecutivo, y todo apunta a que en esta ocasión también logrará coronarse, aunque aún queda mucho por decidir en el sprint final.
No te pierdas el siguiente vídeo de 7