El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, ha decidido poner fin a la controversia que rodea a las boxeadoras Imane Khelif de Argelia y Lin Yu Ting de Taiwán en torno a su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024. Durante una conferencia de prensa realizada el pasado sábado, Bach expresó que 'nunca hubo dudas' sobre la identidad de género de ambas deportistas.

Afirmó que no participarán en una 'guerra cultural' o politizada sobre su condición.

En sus declaraciones, enfatizó: 'Estamos hablando de boxeo femenino, son dos boxeadoras que nacieron mujeres, que crecieron como mujeres, que poseen pasaporte de mujeres, y que han competido durante años en este ámbito'.

Esta declaración surge en medio de críticas y debates que han surgido en las plataformas digitales, donde se han emitido comentarios de odio hacia Khelif y Lin.

Bach condenó estos discursos y lanzó un desafío a quienes duden de su género: 'Les invito a proponer una definición basada en la ciencia sobre qué es una mujer.

Si tienen algo que aportar, estamos dispuestos a escuchar, pero no nos involucreremos en polémicas de índole cultural que en ocasiones están motivadas políticamente'.

Un punto de controversia adicional fue el retiro de la boxeadora italiana Angela Carini tras 46 segundos de combate contra Khelif, lo que ha suscitado reacciones diversas, incluso desde el ámbito político, como la respuesta de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien se reunió con Bach para discutir este tema.

Carini fue reconocida por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) como una campeona olímpica, a pesar de su breve participación en el ring.

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La IBA, que ha sido objeto de críticas debido a irregularidades, otorgará recompensas a los medallistas en París 2024, con cada campeón recibiendo 100.000 dólares (aproximadamente 94.000 euros), lo que ha generado más debate sobre el futuro del boxeo en los Juegos.

Bach también subrayó el papel fundamental de las federaciones internacionales en establecer regulaciones en cada deporte.

Sin embargo, destacó que, debido a la falta de reconocimiento del COI hacia la IBA, es imperativo que las federaciones nacionales se unan para crear un organismo confiable que permita a sus atletas seguir compitiendo en el ámbito olímpico.

'Esto está en sus manos', sentenció.

Más allá de la polémica, la primera semana de los Juegos en París ha sido considerada un éxito tanto a nivel organizativo como en la respuesta del público, según las declaraciones de Bach y Tony Estanguet, presidente del Comité Organizador.

Bach afirmó que la cobertura y el interés global son prometedores, y se mostró optimista sobre la posibilidad de que un gran número de aficionados en todo el mundo haya visto los Juegos, lo que reafirma la capacidad de Francia para acoger eventos de esta magnitud.

Finalmente, Thomas Bach y Tony Estanguet manifestaron su confianza en que las competiciones restantes se llevarán a cabo con éxito, a pesar de los retos presentados por el clima y otros factores.

Con todo, el futuro del boxeo femenino en los Juegos Olímpicos sigue siendo un tema de debate, pero la clara defensa de las autoridades olímpicas de la participación femenina es un indicativo de su compromiso con la inclusión y la igualdad en el deporte.