La ciudad libia de Bengasi, marcada por décadas de conflictos, se convirtió en escenario de un evento de boxeo sin precedentes, con la presencia del legendario Mike Tyson y peleas por títulos regionales de la AMB. La iniciativa busca reactivar el deporte en un país todavía en proceso de reconstrucción política y social.

Situada a orillas del Mar Mediterráneo, en el Golfo de Sidra, #Bengasi fue el epicentro del levantamiento que culminó en la caída del dictador Muammar Khadafi en 2011, y desde entonces, la transición política en #Libia ha sido un proceso complicado y marcado por múltiples conflictos.
El #conflicto armado en Libia dejó daños considerables en Bengasi, con casi un tercio de la ciudad reducido a escombros entre 2011 y 2017. La #reconstrucción ha sido lenta, limitada por la ausencia de una estructura política estable y la persistente presencia de diversas facciones armadas.
Después de años de pugnas, en diciembre de 2017, las Fuerzas del Ejército Nacional Libio lograron recuperar el control de Bengasi, pero la paz definitiva aún no se ha consolidado, y las elecciones nacionales previstas siguen postergadas.
En medio de esta coyuntura, el deporte, en particular el boxeo, ha sido un elemento importante para promover la unidad y la recuperación social en Libia.
Históricamente, el #boxeo fue popular durante la ocupación italiana, aunque su práctica disminuyó considerablemente tras la independencia en 1951 y, posteriormente, durante la dictadura de Khadafi, quien prohibió la disciplina por considerarla demasiado violenta.
Solo tras la caída del régimen en 2011, esta disciplina pudo retomar cierto impulso, con una lenta pero significativa reactivación.
Uno de los eventos que marcan esta revitalización es la participación del excampeón mundial #Mike Tyson en Bengasi. Tyson, considerado uno de los mejores pesos pesados de todos los tiempos, visitó la ciudad en marzo de 2024 y ha estado presente en la organización de eventos deportivos en allí desde entonces.
El viernes pasado, en un hecho histórico, Bengasi fue sede de un evento de boxeo de gran trascendencia: la primera pelea por un título mundial en territorio libio.
La pelea fue organizada por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) como parte del programa WBA Future
La pelea fue organizada por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) como parte del programa WBA Future, con sede en Panamá. Se disputaron tres combates por cinturones regionales de la AMB, y el evento contó con la participación de Tyson como invitado de honor, lo que generó una gran expectativa en la comunidad local y deportistas internacionales.
El evento tuvo lugar en el Estadio de los Mártires de Benina, localizado a 19 kilómetros al este de Bengasi. Este recinto, inaugurado en 2009 y con capacidad para 10,000 espectadores, originalmente llevaba el nombre del exmandatario venezolano Hugo Chávez, pero cambió de denominación tras la caída de Khadafi.
La pelea principal fue un hito, no solo por la calidad del combate, sino también por el simbolismo de celebrar un evento deportivo internacional en un país marcado por la violencia y la inestabilidad.
Entre las peleas del cartel, se destacaron combates con presencia argentina: el catamarqueño Josué Agüero enfrentó al mexicano Diego Ortiz Alemán por el cinturón Gold de la división superpluma, mientras que el rionegrino Christian Luis desafió al cubano Mike Pérez por el cinturón intercontinental crucero.
También destacaron disputas entre aspirantes a títulos mundiales, como la eliminatoria al título mundial mediopesado del organismo y enfrentamientos en peso ligero y peso completo.
Este evento simboliza cómo el deporte puede servir como puente para la reconciliación y la esperanza en zonas afectadas por la guerra civil. Además, refleja el interés internacional en revitalizar el boxeo en regiones donde, durante décadas, estuvo prohibido o en declive. La participación de Tyson, un ícono del deporte mundial, aporta un valor simbólico adicional y puede inspirar a futuras generaciones de deportistas libios y africanos.