En un emotivo evento celebrado este martes en México, Juan Román Riquelme, presidente de Boca Juniors y destacado exjugador, fue honrado al ingresar al Salón de la Fama del Fútbol Internacional.

Este acontecimiento, que tuvo lugar en el Teatro Bicentenario de León, Guanajuato, marca un hito en la historia del fútbol, ya que Riquelme se suma a una selecta lista de leyendas que han recibido esta distinción.

"Un beso muy grande a todos los hinchas de Boca, decirles que los quiero mucho", expresó Riquelme con profunda emoción antes de su investidura.

Su discurso, lleno de recuerdos, destacó cómo desde pequeño soñaba con ser futbolista, sin imaginar que podría alcanzar un reconocimiento de tal magnitud.

"Es una alegría estar aquí y un lujo recibir esta distinción", agregó.

El evento también vio el ingreso de otras figuras icónicas, entre ellas el chileno Iván Zamorano y el paraguayo José Luis Chilavert, quienes, al igual que Riquelme, fueron recibidos con entusiasmo por los aficionados presentes.

Este año, el Salón de la Fama celebra su décima segunda ceremonia, y desde su creación en 2011 ya ha recibido a numerosas estrellas del balompié mundial.

Ubicado en Pachuca, Hidalgo, el Salón busca rendir homenaje a los más grandes talentos del fútbol, y en esta ocasión, Riquelme compartió su alegría por ser parte de un grupo tan ilustre.

"Yo hacía lo que amaba, y eso me pone feliz.

Que mi trabajo haya resonado con los demás es lo que más valoro", comentó Riquelme, quien además fue campeón olímpico en Beijing 2008 con la selección argentina.

Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana

Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.

Por su parte, Iván Zamorano describió la actuación de recibir este premio como un "alimento para el alma", resaltando los 20 años de su brillante carrera.

"Estos premios son como un beso al alma que alegran el corazón", manifestó, refiriéndose a la importancia de reconocimiento que proporciona la ceremonia a quienes han dejado huella en el deporte.

José Luis Chilavert, reconocido por sus hazañas bajo los tres palos, también compartió su reflexión sobre ser uno de los homenajeados.

"Ser reconocido como leyenda viviente es comparable a aquel Mundial que no pude ganar con Paraguay.

Es un honor recibir tal distinción", afirmó el arquero, considerado uno de los mejores en su posición.

Entre los ausentes destacados se encontraban figuras como Diego Simeone, Andrea Pirlo, Oliver Kahn y David Beckham, cada uno de ellos con compromisos que les impidieron participar en la ceremonia.

En la categoría de decanos, fueron homenajeados Sepp Maier y Kristine Lilly, reflejando así la diversidad y la riqueza del fútbol a lo largo de la historia.

El Salón de la Fama, que cuenta con miembros como Pelé, Diego Maradona y Alfredo Di Stéfano, entre otros, continúa siendo un pilar de reconocimiento para quienes han vivido y amado el fútbol.

Con cada ceremonia, se refuerza la conexión entre el deporte y sus seguidores, y el legado de cada jugador se queda inmortalizado en la memoria de los aficionados.