A pesar de la salida anticipada en la Copa Libertadores, el entrenador de Boca, Fernando Gago, sigue en el cargo respaldado por los jugadores y la dirección del club.

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En medio del revuelo generado por el sorteo de la Copa Libertadores, los aficionados de Boca Juniors optaron por desentenderse de la situación, a raíz de la reciente eliminación del club en este prestigioso torneo.

Con los ojos puestos en la Sudamericana, una competición que no brilla al mismo nivel que la Libertadores, el futuro del equipo parece incierto, especialmente en lo que respecta a su director técnico, Fernando Gago.

Desde el descalabro frente a Alianza Lima hace más de un mes, muchos se preguntaban cuántos días más podría Gago ser el timonel de este gigante del fútbol argentino.

Sin embargo, a pesar de atravesar su momento más crítico, el entrenador ha conseguido que el barco siga a flote, logrando una racha de seis victorias consecutivas, un registro que no se veía en el club desde la Superliga 2019/2020, donde Boca conquistó el título bajo la dirección de Miguel Ángel Russo.

Es curioso cómo la dinámica del fútbol puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Tras la decepcionante eliminación, los rumores sobre un posible despido de Gago comenzaron a circular con fuerza, y varios nombres sonaron como sus posibles sucesores.

No obstante, en la intimidad de los pasillos del club, se sabe que estos rumores tienen una guerra interna como telón de fondo. En un momento tenso, Gago se atrevió a preguntar a Marcelo Delgado, miembro del Consejo de Fútbol, si su puesto estaba en peligro, recibiendo una respuesta que le otorgó tranquilidad: "No está en nuestros planes cambiar de técnico.

Trabajá tranquilo".

Uno de los factores que han permitido a Gago continuar en el cargo es el respaldo de los jugadores más experimentados del plantel. Personalidades como Marcos Rojo y Edinson Cavani, junto a Raúl Cascini, han sido determinantes en la construcción de un ambiente positivo dentro del grupo, manifestando apoyo hacia el técnico en momentos difíciles.

Esto se ha reflejado en el rendimiento del equipo en la cancha, donde tras el tropiezo con Alianza Lima, los xeneizes lograron victorias importantes ante Rosario Central, Central Córdoba y Defensa y Justicia.

La relación entre Gago y sus jugadores se ha fortalecido a través de una comunicación constante. "Siempre dieron la cara por mí los jugadores. Ellos querían ganar para redimirse tras aquella derrota. Me gusta hablar con ellos para saber cómo se sienten", declaró el entrenador tras el reciente triunfo que consolidó la racha positiva del equipo.

En términos económicos, Gago tomó medidas calculadas que también han facilitado su permanencia. Al abonar la cláusula de rescisión de su contrato con Chivas de Guadalajara, Gago optó por un equilibrio financiero que Boca ha decidido honrar. Este aspecto no menor comportaba casi 1,9 millones de euros, una inversión que el técnico estaba dispuesto a proteger, dado el compromiso que había asumido al llegar al club.

Además, Gago ha implementado un sistema de juego más estable, apoyándose en una alineación fija que ha brindado confianza a los jugadores, quienes anteriormente lidiaban con la incertidumbre generada por los constantes cambios tácticos.

Con esta estrategia, Boca ahora lidera la Zona A, y se encuentra en la búsqueda activa del campeonato, tal como Gago ha manifestado: “Si queremos ser campeones, tenemos que mejorar”.

Estas afirmaciones resaltan la ambición del club por conseguir un nuevo título y abrirse camino hacia una clasificación en la Libertadores 2026, un objetivo que podría sanar las recientes heridas de la competencia continental.