Fernando Gago llegó a Argentina el domingo por la tarde, marcando así el inicio de su nueva etapa como director técnico de Boca Juniors.

Con un viaje que duró más de ocho horas, tuvo tiempo suficiente para planificar sus próximos pasos en un club que ha sufrido en los últimos años.

Este lunes, Gago será presentado oficialmente y tomará el control de un plantel que quedó en la cuerda floja tras la partida de Diego Martínez.

A su llegada, el entrenador expresó su gratitud a los hinchas de Boca, quienes le enviaron mensajes de apoyo durante su tiempo en México.

Regresó al país con su familia y una inmensa cantidad de equipaje, reflejando así la importancia de su retorno al club que lo vio nacer como jugador.

La noche de su llegada, el DT reveló: “Mañana tendremos tiempo para hablar.

Regreso a casa”.

Gago no solo se enfrenta a la presión del presente, sino a un futuro inmediato lleno de expectativas.

En medio de un intenso calendario, su principal objetivo será levantar un equipo que, en los últimos dos años, ha tenido resultados decepcionantes, quedando sin títulos importantes.

La hinchada aún tiene la esperanza de conseguir la Copa Argentina, su primer desafío en esta nueva etapa, que se disputará el 23 de octubre contra Gimnasia en el estadio de Newell's.

El lunes por la tarde, tras la firma de un contrato que se extiende hasta diciembre de 2024 con opción hasta finales de 2026, Gago dirigirá su primera práctica preparándose para el próximo encuentro contra Tigre.

En el horizonte también se vislumbran discusiones sobre refuerzos para el Mundial de Clubes, un torneo que añadirá más presión a su nuevo rol.

Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana

Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.

Reconocido por su estilo metódico y estratégico, Gago ha demostrado ser un técnico con enfoque en la tenencia del balón y presiones tras pérdida, algo que fue clave durante su tiempo en Racing, donde logró 53 victorias en 109 encuentros.

Al igual que en su etapa anterior, se espera que implemente una formación 4-3-3, que podría adaptarse a otras variantes según lo requiera el partido.

Boca tiene recursos que podrían encajar bien con su enfoque, con jugadores como Luis Advíncula y Lautaro Blanco para potenciar las bandas.

Uno de los desafíos que se le presentan es recuperar a los jugadores que se encontraban en un bajo nivel.

Marcos Rojo y Sergio Romero, por ejemplo, tienen un papel crucial y Gago ya ha dejado claro que no habrá lugar para la complacencia; quienes no estén al 100% quedarán fuera del once inicial.

En el pasado, Gago ha sido conocido por sus decisiones difíciles cuando se trata del estado físico de los jugadores; ha marginado a talentos por razones de disciplina y condición física.

Históricamente, Boca Juniors ha sido un club que exige resultados inmediatos y Gago lo sabe bien.

En su tiempo como jugador, fue parte de un equipo exitoso que logró múltiples títulos.

Ahora, como entrenador, su desafío será devolver a Boca a la senda del triunfo y satisfacer a una afición ansiosa de nuevos campeonatos.

La era Gago en Boca comienza, y todos los ojos estarán puestos en cómo se desarrollará este ambicioso proyecto que podría llevar al equipo hacia su regreso a la gloria.