Un funcionario del Estado acusa a Juan Román Riquelme y la gestión del club de presuntos delitos administrativos y de enriquecimiento ilícito, en medio de una disputa que involucra a socios y autoridades de Boca Juniors.

Un funcionario del Gobierno Nacional ha presentado una denuncia formal contra Juan Román Riquelme, vicepresidente y figura clave de Boca Juniors, por presunta administración fraudulenta y enriquecimiento ilícito.
La denuncia fue interpuesta por Walter Klix, quien se desempeña como Director de Seguridad en la Área de Precursores Químicos del Estado argentino, y se realizó en los Juzgados Correccionales N°56 y N°61.
Klix, socio del club desde hace tres décadas y con participación activa en la política interna de Boca, aseguró que su postura responde a una preocupación genuina por la integridad del club y para evitar que acciones de los directivos afecten los intereses de los socios y la institución.
En declaraciones a la prensa, Klix afirmó que sus acciones van más allá de la política: “Hago esto por Boca, porque quiero proteger a nuestro club de posibles irregularidades que puedan perjudicar su historia y a quienes lo apoyamos.
No me quedo en la denuncia pública, sino que quiero que la Justicia investigue en profundidad”. La denuncia de Klix se hizo viral a través de redes sociales y medios tradicionales, donde se han difundido fragmentos de los documentos presentados y declaraciones del mismo.
Además, Klix participa activamente en la vida política del club y fue candidato en la lista de José Beraldi, ex presidente que se enfrentó a la gestión actual.
Entre las principales preocupaciones que Klix pone sobre la mesa, están las irregularidades en el manejo de los abonos y carnets de socio, y la desaparición de al menos 45.000 prendas de la marca Adidas que, según la denuncia, se habrían extraviado en circunstancias sospechosas. La situación ha generado un fuerte malestar entre los socios, quienes manifiestan que han sido expulsados o excluidos sin justificación y que la lista de socios afiliados se manipula mediante prácticas sospechosas.
Boca Juniors cuenta actualmente con aproximadamente 320.000 socios, de los cuales solo unos 50.000 tienen acceso a las tribunas del estadio La Bombonera. Los demás, particularmente los adherentes, pagan una cuota menor y no tienen derecho a ingresar en los partidos. Este segmento, según denuncia Klix, se utiliza para favorecer a ciertos grupos en las elecciones internas, que deben celebrarse en los próximos dos años.
Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana
Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.La polémica se agudiza al conocerse que en los últimos meses, algunos socios han sido dados de baja por retrasos mínimos y reemplazados por otros, en lo que parece ser un sistema poco transparente.
Los eventos recientes se han visto enmarcados en un escenario en el que ciertos sectores políticos y deportivos señalan que la gestión de Riquelme, apoyada por dirigentes ligados a Mauricio Macri, está afectada por prácticas que podrían estar infringiendo leyes y estatutos del club.
La denuncia de Klix se suma a otras que buscan esclarecer posibles irregularidades, en un contexto donde la transparencia y la justicia son reclamadas por diferentes actores dentro de la comunidad xeneize.
El proceso judicial que se inicia en torno a esta denuncia analizará en detalle las acusaciones y pruebas aportadas, además de solicitar información a las autoridades del club y revisar documentos y registros relacionados con la administración interna.
La expectativa es que, si se comprueba alguna de las irregularidades denunciadas, puedan tomarse medidas correctivas y sanciones ejemplares, para garantizar la legalidad del club y la protección de sus socios.
Este escenario se desarrolla en medio de una historia marcada por conflictos internos en Boca Juniors, donde las disputas por el poder y la orientación del club han sido frecuentes a lo largo de sus 118 años de historia.
La figura de Riquelme, ídolo y actual vicepresidente, ha sido central en la última década, pero su gestión no está exenta de polémicas, especialmente en un momento en que la institución busca recuperar su prestigio tanto en lo deportivo como en la gestión administrativa.
La comunidad xeneize espera una respuesta clara y transparente de las autoridades judiciales para esclarecer estos hechos y restaurar la confianza en su institución emblemática.