La reciente lesión del mediocampista Ander Herrera complica los planes de Boca Juniors, que sufre una serie de problemas en su rendimiento.

El equipo de Boca Juniors, dirigido por Fernando Gago, se encuentra en una encrucijada tras la inesperada lesión de su mediocampista Ander Herrera en un partido reciente contra Newell's.
Esta situación llega en un mal momento, ya que el conjunto Xeneize parecía empezar a mostrar una mejoría en su rendimiento. Sin embargo, el encuentro en Rosario puso en evidencia los problemas que afrontan tanto Gago como sus futbolistas.
Durante la primera mitad del partido, Boca se encontraba perdiendo por 2-0 ante Newell's, que lucía más intenso y dominador. En un intento por revertir la situación, Gago decidió hacer tres cambios al inicio del segundo tiempo: Ander Herrera fue sustituido por Milton Delgado, Luis Advíncula ingresó en reemplazo de Lucas Blondel, y Rodrigo Battaglia reemplazó a Lautaro Di Lollo.
Sin embargo, apenas cinco minutos después de estas modificaciones, Herrera sufrió una lesión muscular en el recto anterior de su muslo derecho, lo que obligó su salida del campo de juego.
El momento se volvió aún más caótico cuando Gago, tras realizar tres cambios, se vio forzado a hacer uno más a solo cinco minutos de iniciada la segunda parte.
Visiblemente frustrado, el técnico hizo un llamado a su asistente, Fabricio Coloccini, pidiendo ayuda para decidir quién debería reemplazar a Herrera.
Este tipo de reacciones descontroladas son un indicativo de la presión y la tensión que vive el equipo en este momento crítico.
Finalmente, el elegido para entrar en el terreno fue Exequiel Zeballos, lo que significó un cambio en la estrategia. Posteriormente, Miguel Merentiel también se sumó al campo, lo que llevó a Boca a agotar sus cambios en un periodo de tiempo muy breve. Estos hechos evidencian la profundidad de la crisis que enfrenta el club y la capacidad limitada de Gago para gestionar el equipo bajo presión.
Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana
Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.La situación se complica aún más con la confirmación de la lesión de Herrera. Después de someterse a pruebas, se determinó que el español, que se unió a Boca Juniors en enero de este año, se perderá al menos tres partidos importantes: contra Barracas Central, Belgrano y Estudiantes de La Plata.
Su ausencia será notable especialmente en el próximo Superclásico frente a River Plate, programado para el 27 de abril, una de las citas más esperadas por los aficionados del fútbol argentino.
Además, es importante recordar que desde su llegada a Boca, Herrera ha tenido un rendimiento bastante limitado. En los siete partidos que ha disputado, ha acumulado un total de 389 minutos en el campo, sin lograr marcar goles ni ofrecer asistencias, sumando solo una tarjeta amarilla.
Este inicio difícil ha llevado a muchos a cuestionar la efectividad de las incorporaciones al equipo y cómo Gago manejará el recorrido del club en el campeonato.
La presión ahora recae no solo sobre el técnico, sino también sobre los jugadores que deberán asumir la responsabilidad en la ausencia de su compañero.