El club de La Ribera analiza la participación de Carlos Bianchi en el próximo Mundial de Clubes como representante honorario, mientras se intensifican las especulaciones sobre su retorno al equipo en diferentes funciones.

Las conversaciones en torno a la figura de Carlos Bianchi en Boca Juniors volvieron a tomar fuerza en las últimas semanas, en medio de la proximidad del Mundial de Clubes que el club argentino disputará en Estados Unidos.
Aunque oficialmente no se ha confirmado ninguna decisión, los rumores indican que Boca estaría considerando una participación honoraria del mítico entrenador como embajador del club durante dicho torneo.
El próximo Mundial de Clubes, que se jugará en Miami en junio, enfrentará a Boca en dos partidos frente a Benfica y Bayern Múnich, y otro con Auckland City en Nashville.
La presencia de Bianchi en estos encuentros podría ser un reconocimiento a su legado en el club, donde conquistó múltiples títulos y llevó a Boca a lo más alto del fútbol internacional en la década del 2000.
Carlos Bianchi, de 76 años, se convirtió en una leyenda del fútbol argentino y del club xeneize, gracias a sus éxitos en la gestión deportiva, sus tres ciclos como director técnico y su vínculo cercano con figuras como Juan Román Riquelme.
Desde su retiro, ha residido en París, disfrutando de su familia y sus nietos, alejándose en cierta medida del mundo del fútbol ejecutivo. No obstante, su nombre siempre aparece en las conversaciones cuando se trata de posibles movimientos o gestos simbólicos para Boca.
El interés por contar con Bianchi como representante no es solo simbólico, sino también una forma de fortalecer la identidad y la historia del club en un torneo de tanta relevancia internacional.
La idea es que, en caso de su participación, pueda ofrecer discursos, apoyar en actividades de relaciones públicas y transmitir la historia de Boca ante una audiencia global.
En su pasado, Bianchi dejó una huella imborrable en Boca, no solo por los títulos alcanzados, sino también por el estilo de juego que instauró y su capacidad para motivar a sus jugadores en momentos críticos.
Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana
Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.Entre sus mayores logros están las conquistas de las Copas Libertadores en 2000, 2001 y 2003, y las obtenidas en la Copa Intercontinental, incluyendo aquella victoria contra el Real Madrid en 2001 en Japón.
La relación del club con el técnico también tuvo sus altibajos, especialmente en los últimos años. Bianchi regresó a Boca en 2013 para su tercer ciclo, que duró un año y medio y culminó en un torneo con resultados dispares, incluyendo la eliminación en Libertadores y un rendimiento que no estuvo a la altura de su historia glamurosa.
Sin embargo, su paso por el club dejó huellas profundas en la memoria de los hinchas y en la historia institucional.
Por otro lado, Juan Román Riquelme, actual vicepresidente de Boca, ha dicho en varias ocasiones que admira profundamente a Bianchi y considera que su legado es fundamental para entender la identidad del club.
En recientes declaraciones, mencionó que la presencia de Bianchi en Miami durante el Mundial sería un homenaje merecido a su carrera y a su impacto en la historia del club.
Aunque aún no hay una confirmación oficial, en Boca se continúa evaluando la propuesta, y las conversaciones internas apuntan a que una participación en el Mundial como embajador honorario sería un gesto simbólico que reforzaría el orgullo y la memoria popular del club, además de brindar una experiencia distinta a los jugadores y la dirigencia.
En resumen, la posible incorporación de Carlos Bianchi como embajador en el Mundial de Clubes representa más que un reconocimiento, refleja el vínculo profundo entre el entrenador y Boca Juniors, un club que siempre valora su historia y sus ídolos que marcaron una época dorada en el fútbol sudamericano y mundial.