Son momentos complicados en Boca.

La derrota ante Platense y el bajo rendimiento del equipo provocaron una crisis que llevó al presidente Juan Román Riquelme a visitar al plantel.

Aunque no quedó claro si su intención era reprenderlos o levantarles el ánimo.

Además de motivarlos, Riquelme les dejó en claro que el juego actual no es aceptable.

Sus palabras resonaron en todo el equipo e incluso en el director técnico, Diego Martínez, quien se vio desautorizado al no participar en la reunión convocada por el ídolo dirigente.

Ante la incertidumbre que rodea al club, Riquelme y su Consejo de Fútbol están acelerando las gestiones para reforzar el cuestionado plantel de cara a la segunda mitad de la temporada.

En juego se encuentran la Liga, la Copa Argentina que otorga un cupo a la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana.

Es evidente que lo que tienen actualmente no es suficiente y necesita ser mejorado, e incluso renovado.

Se busca una nueva versión de Boca.

Se han identificado cinco posibles refuerzos con los que ya se han iniciado contactos informales para evaluar su disponibilidad.

Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana

Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.

Entre ellos se encuentran Joaquín Pereyra, Tomás Belmonte, Pedro de la Vega, Lucas Robertone y Adam Bareiro.

Cada uno de ellos aportaría distintas cualidades al equipo y representarían una mejora en sus respectivas posiciones.

Estas incorporaciones serían especialmente importantes ante la segura ausencia de jugadores clave como Equi Fernández, Kevin Zenón y Cristian Medina, quienes han sido preseleccionados para los Juegos Olímpicos.

Además, Pol Fernández ha manifestado su deseo de abandonar el club.

Ante estas bajas, la necesidad de nuevos refuerzos se vuelve aún más urgente.

El desafío para Boca es grande, pero con la llegada de nuevos futbolistas de calidad, el equipo podría plantar cara en competiciones como la Copa Sudamericana.

Se espera que en las próximas semanas se concreten las negociaciones y que los refuerzos puedan sumarse al plantel lo antes posible.

El mensaje está claro: Boca necesita cambiar su rumbo y apostar por caras nuevas para volver a la senda del éxito.