Los principales favoritos para alzarse con el Balón de Oro en 2025 son Lamine Yamal, Ousmane Dembélé y Kylian Mbappé, quienes muestran diferentes logros y trayectorias en una temporada marcada por competencia y renovación generacional.

Este premio, que celebra al mejor futbolista del año, siempre genera interés y debate entre aficionados, medios y expertos.
Para la edición de 2025, hay tres nombres que destacan por encima del resto: Lamine Yamal, #Ousmane Dembélé y Kylian Mbappé. La votación, que involucra a entrenadores, capitanes de selecciones nacionales, periodistas de todo el mundo y una minoría de aficionados, suele ser muy reñida, y en esta ocasión no será diferente.
El último test importante antes de la resolución se dio en la Liga de Naciones, donde los partidos ofrecieron una buena oportunidad para evaluar a los candidatos en partidos de alto nivel.
Sin embargo, la simpatía o el rendimiento en estos encuentros a veces no pesan tanto como los logros acumulados durante toda la temporada.
Lamine Yamal, con solo 17 años (cumple 18 en julio), ha tenido un año sobresaliente. Su actuación ha sido clave en el FC Barcelona, conquistando títulos como La Liga, la Copa del Rey y la Supercopa de España. Además, su presencia en la selección francesa llevó a Francia a las semifinales de la Liga de Naciones. Sin embargo, en la final contra España, Yamal estuvo algo desaparecido y fue sustituido en un momento crítico del partido. Aunque su rendimiento en grandes escenarios todavía puede mejorar, su talento precoz lo posiciona como uno de los favoritos.
Ousmane Dembélé
Por su parte, Ousmane Dembélé, quien se convirtió en una figura esencial en el París Saint-Germain bajo la dirección de Luis Enrique, solidificó su temporada logrando sendos campeonatos en la Coupe de France y en la Ligue 1.
A nivel internacional, Dembélé contribuyó a que Francia alcanzara las semifinales de la Liga de Naciones y fue un actor relevante en la fase eliminatoria, especialmente en partidos donde su creatividad y velocidad marcaron la diferencia.
Aunque en la final no anotó goles, su trabajo fue fundamental.
En el caso de Kylian Mbappé, la temporada en su club, el Paris Saint-Germain, fue menos brillante, sin títulos en el aspecto colectivo, pero su contribución con la selección francesa fue destacada.
Llegó a las semifinales de la Liga de Naciones y fue pieza clave en la remontada histórica de 5-4 contra España. En el tercer puesto, sus esfuerzos y liderazgo recibieron numerosos elogios, aunque queda la duda si su rendimiento en clubes pesará en la votación final.
La elección del ganador del #Balón de Oro será muy disputada, y por tradición, no suele haber un ganador con un amplio margen. Los méritos individuales, los resultados de los equipos y el lobbying asociado a estas distinciones también influyen. La llegada de una nueva generación de talentos, marcada por Yamal, Dembélé y Mbappé, sugiere que estamos presenciando una transición en la élite del #fútbol mundial, dejando atrás el legado de leyendas como Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.