El joven delantero romano destaca en el partido contra el Getafe, marcando dos goles y consolidándose como figura en el Atlético de Madrid.

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En el partido de ayer, el joven Giuliano Simeone dejó una huella imborrable en el estadio Metropolitano al marcar dos goles en solo 17 minutos, llevando al Atlético de Madrid a una clara victoria sobre el Getafe por 5-0.

Esta actuación no solo consolidó su lugar en el once titular, sino que también lo convirtió en el nuevo ídolo de la afición colchonera, que se rindió ante su destreza y esfuerzo en el campo.

Desde el primer minuto de juego, la energía de Giuliano se hizo notar. En el minuto 8, conectó con un centro de Javi Galán y anotó de cabeza el primer gol del encuentro. Apenas ocho minutos después, recibió un gran pase de Julián Álvarez, se adentró en el área y disparó con precisión para marcar su segundo gol, completando así su primer doblete con el club.

El estadio, que registró una asistencia de 52,896 espectadores, se llenó de ovaciones para el delantero de 22 años.

A lo largo de los últimos meses, Giuliano ha experimentado un meteórico ascenso desde su regreso a Madrid tras una temporada en el Deportivo Alavés.

Su impresionante ética de trabajo y habilidades técnicas han logrado conquistar a un público exigente que valora no solo los resultados, sino también el sacrificio en el terreno de juego.

En un entorno competitivo como el del Atlético de Madrid, es fundamental que los jugadores se ganen la admiración a través de su desempeño, y Giuliano ha sabido hacerlo a la perfección.

A pesar del orgullo que siente por el éxito de su hijo, el entrenador Diego Simeone ha optado por no sobrecargarlo de presión. Prefiere mantener un ambiente en el que su hijo sea solamente uno más del equipo. Este enfoque se refleja en la actitud del futbolista, quien sigue trabajando con humildad y dedicación. 'De tal palo, tal astilla', es la frase que resuena en el vestuario sobre su ascenso a la élite del fútbol.

El partido contra el Getafe resultó ser un paseo para el Atlético, que dominó de principio a fin. La seguridad defensiva y la capacidad ofensiva se combinaron para anular cualquier intentona del equipo rival. El Getafe, que ha tenido una racha de 27 partidos sin conseguir una victoria ante los colchoneros, nunca pareció estar en el partido, ya que su enfoque principal se encuentra en la lucha por la permanencia en La Liga.

Samuel Lino fue el encargado de marcar el tercer gol antes del medio tiempo, mientras que Ángel Correa y Alexander Sorloth completaron el 'festival' goleador en la segunda parte.

Por su parte, Giuliano se mostró enérgico incluso tras marcar, buscando más oportunidades y mostrando una actitud ejemplar. A pesar de que un gol adicional fue anulado por fuera de juego, su influencia en el juego fue innegable.

'Desde chiquito, todos sueñan con momentos así', expresó un emocionado Giuliano tras el encuentro. Con su actuación estelar, no solo ha asegurado su lugar como una de las principales figuras del equipo, sino que también ha encendido las esperanzas de la afición de cara a las semifinales de la Copa del Rey.

Este talento naciente abre una puerta prometedora para el futuro del club y para el propio jugador.