En un pasado reciente, Abel Poza se hizo conocido por sus acciones en la barra brava de Huracán, pero hoy es el presidente del club y su historia es una de superación y compromiso.

Con 4.278 votos, casi el 70 por ciento de los sufragios, Poza se convirtió en el nuevo mandamás del Globo, con proyectos ambiciosos para el futuro de la institución.

Su ascendencia en la tribuna se remonta a su adolescencia, cuando era conocido como el Rubio Abel y participaba activamente en enfrentamientos entre barras.

Sin embargo, con el tiempo, Poza decidió alejarse de la violencia y enfocarse en la política interna del club.

A pesar de su pasado controvertido, Poza ha demostrado ser un mediador efectivo entre distintos sectores de la hinchada de Huracán, evitando conflictos y promoviendo la convivencia pacífica.

Su prontuario judicial incluye varias causas penales, pero también sobreseimientos y absoluciones, lo que no ha impedido su ascenso en la dirigencia del club.

Además, Poza ha tenido un papel destacado en la organización Hinchadas Unidas Argentinas, buscando acabar con la violencia en el fútbol argentino.

En su vida personal, Poza ha vivido momentos de controversia, como el incidente protagonizado por su hija Alanis en una fiesta con futbolistas famosos.

A pesar de ello, su compromiso con el club es innegable, y su gestión al frente de Huracán promete llevar a la institución a un nuevo nivel.

Con tres años por delante en la presidencia, Abel Poza tiene el desafío de mantener la paz en el estadio y seguir impulsando el crecimiento de la entidad que ama.

Datos históricos: Huracán fue fundado en 1908 y ha tenido una rica historia en el fútbol argentino, con varios títulos nacionales e internacionales en su haber.

El club ha sido reconocido por su estilo de juego vistoso y ofensivo, y por su fervorosa hinchada, que suele alentar con pasión en cada partido.

La institución ha pasado por momentos difíciles en su historia, pero siempre ha sabido salir adelante gracias al compromiso de dirigentes como Abel Poza.