La región presenta una estabilización en el número de nuevos diagnósticos de VIH, destacando el impacto de las políticas de salud implementadas en los últimos años.

En Cataluña, se ha observado una estabilización en la cantidad de nuevos diagnósticos de VIH, lo que sugiere un avance en el manejo y la prevención de esta enfermedad.

De acuerdo con los datos más recientes, en el año 2023 se registraron 481 nuevos casos de VIH, una situación que ha mostrado una tendencia a la disminución desde 2010. De esos nuevos diagnósticos, un abrumador 86,9% corresponde a hombres, con una edad promedio de 38 años entre los diagnosticados.

En total, se estima que alrededor de 35,353 personas viven actualmente con el VIH en esta comunidad autónoma.

La principal vía de transmisión sigue siendo la sexual, con un 53,4% de los nuevos diagnósticos en hombres que tienen sexo con otros hombres, mientras que un 34,4% de los casos corresponden a parejas heterosexuales.

Esta situación resalta la necesidad de mantener programas de concienciación y prevención.

Las causas detrás de esta estabilización son variadas, siendo una de las más significativas la expansión de los tratamientos disponibles.

Desde 2015, el acceso a tratamiento para el VIH ha sido universal en Cataluña, lo que ha permitido que más personas reciban la atención médica que necesitan.

Además, el uso de la profilaxis previa a la exposición, conocida como PrEP, ha crecido considerablemente, beneficiando a más de 10,500 personas hasta la fecha.

Las iniciativas implementadas en los últimos años abarcan un amplio espectro de intervenciones en diferentes niveles, lo que ha permitido una respuesta integral al VIH.

El Plan de Acción frente al VIH y otras ITS 2021-2030 es un marco regulador que se ha puesto en marcha en Cataluña, destinado a reducir la incidencia de las infecciones de transmisión sexual.

Este plan también incluye medidas para facilitar el acceso temprano a tratamientos y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, así como para combatir la estigmatización relacionada con estas enfermedades.

En línea con este enfoque, se ha instituido un Pacto Social contra la discriminación de las personas con VIH. Este pacto busca modificar la percepción del VIH en la sociedad, combatir la serofobia, y asegurar que todos los ciudadanos tengan acceso equitativo a servicios, beneficios y oportunidades laborales.

En el contexto actual, se han logrado avances significativos hacia el compromiso global '95-95-95', que establece como objetivos que el 95% de las personas que viven con VIH conozcan su estado, que el 90% estén recibiendo tratamiento, y que el 98% de estas últimas alcancen una carga viral indetectable.

Hasta ahora, en Cataluña se ha alcanzado un 95% de conocimiento del estado serológico, un 90% en cuanto al tratamiento y un 98% de carga viral indetectable.

Con el objetivo de erradicar el VIH como amenaza para la salud pública en 2030, se ha lanzado un manifiesto titulado 'Seguimos avanzando', en el que 131 entidades, tanto públicas como privadas, han abogado por la sensibilización social y la importancia de trabajar en conjunto para enfrentar este reto.

Esta campaña se alinea con la celebración del Día Mundial del Sida, el 1 de diciembre, subrayando la necesidad de un esfuerzo conjunto para eliminar el VIH de la agenda de salud pública en los próximos años.