La Agencia de Salud Pública de Cataluña (ASPCAT) ha reportado que la probabilidad de transmisión de mpox en la región es actualmente muy baja.

Durante el año 2024, se han documentado un total de 29 casos, lo que representa aproximadamente un tercio de los registros realizados en el año 2023. Los casos más recientes se notificaron en la semana comprendida entre el 14 y el 20 de julio de 2024. Esta notable reducción en el número de contagios sugiere que las medidas de prevención y vacunación están teniendo un impacto positivo en la salud pública regional.

Es importante recordar que la situación de mpox varía significativamente en comparación con otras regiones, especialmente en África, donde se dificultan las acciones de control y prevención debido a limitaciones en recursos y logística.

En muchos países africanos, la capacidad para implementar medidas de salud pública efectivas sigue siendo un reto, lo que contribuye a una situación epidemiológica más crítica.

El próximo encuentro del Comité de Seguridad Sanitaria de la Unión Europea, junto con la Ponencia de Alertas del Ministerio de Sanidad, se centrará en discutir posibles modificaciones a las recomendaciones actuales sobre vigilancia y vacunación frente al mpox.

Este debate es crucial, ya que permitirá ajustar estrategias para mejorar la respuesta ante esta enfermedad en el futuro.

Desde el inicio de la campaña de vacunación contra el mpox en Cataluña en 2022, se han administrado más de 23.500 dosis, posicionando a la región como un ejemplo en la gestión de esta problemática.

La vacuna está disponible para grupos de riesgo, que son las personas que mantienen relaciones sexuales sin la protección adecuada.

Se enfatiza la importancia de completar el esquema de vacunación, que contempla dos dosis, a fin de reforzar la inmunidad entre quienes son más susceptibles a contraer la enfermedad.

Esta estrategia de vacunación es parte de un enfoque más amplio para garantizar la salud pública, especialmente entre las poblaciones vulnerables, y se espera que contribuya a la disminución de la incidencia.

Históricamente, la variabilidad en los brotes de mpox ha estado relacionada con factores sociales y económicos, así como con la falta de acceso a la atención médica en muchas regiones.

La respuesta a estos brotes no puede ser única y requiere la implementación de medidas a través de colaboración internacional y apoyo financiero.